Ese ha sido el regalo que 8000vueltas ha pedido a los reyes magos, pero no va a ser tan fácil. Da igual cuantas vueltas hayas dado en la PlayStation, da igual cuantos videos hayas visto en Youtube, si no has estado, no eres capaz de hacerte una idea de lo especial que es el Ring. Puedes empezar leyendo el fantástico artículo que publicamos en 8000vuletas.com sobre Nurburgring Nordschleife: el anillo norte, te garantizo que si eres “uno de los nuestros” te emocionarás, se te pondrán los pelos de punta y quizá hasta derrames una lagrimita pero tras la abrumadora sensación de ir descubriendo el Infierno Verde tan sólo se esconde una infinitesimal parte de lo demoledor que supone el golpe de “estar allí”, a las puertas del cielo.

Tuve la ocasión, casi por casualidad, de rodar allí en marzo de 2009, y aún no me explico como a 30 km del circuito ya llevaba los pelos como escarpias, conduciendo un sencillo coche de alquiler como un poseso por las reviradas carreteras por las que me llevaba el navegador diciéndome a mi mismo: “Tío, estas yendo a Nurburgring”.  Uno de los momentos que mejor recuerdo fue cuando por fin llegué a la carretera que discurre paralela a la larga recta que sale desde Döttinger Höle y que casi 3 km después acaba en la preciosa frenada de Tiergarten, cuando ya podía ver los carteles de Bilstein y Yokohama y las indicaciones para entrar al pequeño parking dónde se compran los tikets para dar unas vueltas . Ese día sólo pude dar una vuelta (guardo en casa una ring-card con 3 vueltas más), una sóla y como podrás imaginar: Sí, fueron mis 21 mejores Km.

Soy de los que creen que a veces, de forma inexplicable, hay fenómenos, hechos que se suceden en el tiempo en un equilibrio precario y frágil. El Ring, se rige por unas leyes distinas, allí conviven día a día, en una carretera de un solo sentido las mejores marcas del mundo poniendo a punto sus mejores obras de arte con fanáticos de los coches buscando esa décima perdida en alguna de sus más de 170 curvas con autobuses de turistas dando una vueltas a japoneses sacando fotos, y lo bonito es que esta mezcla heterogénea y casi increíble discurre en paz. Pero ahora esto puede desvanecerse.

Hace ya algunos días veíamos a Sabine Schmitz en un video felicitándonos las navidades y advirtiéndonos: El Ring está en peligro.

Desde 2007 se venía construyendo en Nurburgring un gran centro comercial y un parque temático que venía a cubrir, o eso dijeron sus promotores, una necesidad turística que fomentaría la región de Eiffel.

Lo que comenzó como una iniciativa totalmente privada pasó a ser un proyecto privado financiado por dinero público. Al parecer el proyecto se basó sobre unos datos de visitas anuales “algo” exagerados (ver gráfica) por lo que el centro se ha sobredimensionado y la mayoría del tiempo está prácticamente vacío.

Como resultado, actualmente, el complejo tiene una deuda de más de 350 millones de Euros. A día de hoy, el parque está en manos privadas y los responsables de su explotación, personas no ligadas al mundo del motor experimentan con eventos que nada tienen que ver con el mundo del motor.

Con todo ello, el circuito está sufriendo una deformidad absoluta: las tarifas que hay pagar por rodar suben  hasta un 25 % para turistas y hasta 5 veces más si una marca alquila el circuito para jornadas de test y desarrollo.

Desde la plataforma Save The Ring se proponen varias medidas para salvar el Circuito.

• Separar el parque temático del Circuito.
• Fomentar el espectáculo del motor sobre otros espectáculos.
• Fomentar y reseñar la gran herencia que rodea al ring y el poder de congregar gente e industria.
• Destituir al binomio Kai Richter/ Jörg Lindner promotores del parque y gestores del circuito por alguien con experiencia y raíces en el mundo del motor.

¿Qué podemos hacer nosotros?

• Seguir al grupo Save The Ring en Facebook, que en menos de 3 semanas ha conseguido cerca de 30000 seguidores.

• Firmar la solicitud que se enviará a Joaquin Almunia, vicepresidente de la UE, con el objetivo arriba mencionado.
• Al visitar el Ring, apoyar el comercio y los negocios locales.
• Difundir este mensaje.

No vamos a entrar a opinar como de mal o de bien se está gestionando ahora mismo el circuito, el Ring es la esencia más pura de historia del automovilismo mundial que queda en pie. No dejemos que desaparezca. Es el Ring.

Extra Lap

¿Nostalgia?:

Ring shots, por Julien Mahiels