Prueba Hyundai Kona N: ¿Para quién?

Es un coche ciertamente extraño, porque sin tener la disposición mecánica de un deportivo tradicional (bajo, ligero…) en Hyundai le han dado un caracter que sin duda alguna se puede tildar de deportivo puro: duro de suspensiones, ruidoso, rápido, llamativo...

Hyundai Kona N - 8000vueltas

Pero tras haberlo probado durante una semana sigo preguntándome lo mismo: ¿a quién va dirigido este coche?¿Quién va a pagar los 45.000 € que cuesta nuestra unidad (equipada con todos los extras)?

Es cierto que el Kona N parte de 41.000 € y que hay que restar los jugosos descuentos que aplica Hyundai (4.500 € actualmente) y lo que le puedas «rascar» al concesionario, pero aún así, quién busque un buen deportivo dentro de la marca coreana, por menos dinero tiene el i30 N, que es mejor coche.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-38

Por el contrario, si lo que buscas es un coche pequeño, nos iríamos al i20 N, que nos parece uno de los coches más divertidos si quieres hacer puertos de montaña ratoneros. El Kona N podría resumirse como un mix de i20 N «levantado» con la mecánica del i30 N Performance (280 cv + Autoblocante).

«El Kona N podría resumirse como un mix de i20 N «levantado» con la mecánica del i30 N Performance (280 cv + Autoblocante)».

Las marcas pretenden asociar la palabra SUV a vehículo premium, aunque sería más correcto asociarlo a «practicidad» (entre comillas) o a gente a la que le viene bien subir y bajar de un coche alto por cuestiones de comodidad. Quien sin estas necesidades compra un SUV, tendrá otro tipo de motivaciones, pero ninguna de ellas relacionadas con el sentido común.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-33

A donde quiero llegar es a que el Kona N no es premium (los interiores están poblados de plásticos duros y ¡no equipa climatizador bizona!), y desde luego no es un coche cómodo o con el que te puedas meter por pistas como si fuera un Dacia Duster.

¿Cuál es su punto fuerte entonces? Que al igual que sus hermanos N antepone el disfrute por encima de otras cosas. Es sentarse al volante e inmediatamente te vuelves un poco «macarra»: te apetece hacer ruido, acelerar a fondo, escuchar los escapes petardeando y buscar curvas…Tanto es así que tras ajustarme asiento, volante y retrovisores en mi primera toma de contacto, lo primero que se me pasa por la cabeza es: ¿dónde está el Launch Control»? Te prometo que yo no soy así (bueno, un poco sí), pero sobre todo es que este coche «me enciende», me pide guerra.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-24

Con todo a temperatura de servicio (mi compañero Marco me acaba de pasar el testigo tras unos cuantos km), es así como comienzo esta prueba : Modo N, ESP OFF, freno pisado, gas a fondo… Revoluciones a 3500 rpm y ¡PAM! los 280 cv golpean tu espalada (y la transmisión) violentamente mientras los neumáticos delanteros buscan adherencia en vano, con el motor en la zona roja, mientras escarban el asfalto en busca de una segunda velocidad que les de un respiro. Y así llegas hasta los 100 Km/h en solo 5,5 segundos.

¿Para qué? Ni lo sé ni me importa. De momento, si lo que Hyundai ha hecho es un coche de disfrute, voy a disfrutarlo.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-23

A esta primera toma de contacto le siguen varios cientos de km de autovía – con algunas zonas de curvas muy rápidas- y otros tantos de nacional donde es necesario adelantar camiones y coches que suponen un obstáculo a tu misión de pasarlo bien. Los adelantamientos se suceden sin esfuerzo y solo el sentido común te impide adelantar a los camiones de tres en tres o a los coches de 6 en 6.

«Solo el sentido común te impide adelantar a los camiones de tres en tres o a los coches de 6 en 6″.

En curvones de autovía se comporta bien a velocidades de pérdida de carné de conducir; sorprendentemente bien para ser un coche alto, pero inevitablemente peor que, por ejemplo, un i30 N, lo que vuelve a constatar lo que llevamos años diciendo: no se puede engañar a las leyes de la física.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-31

El SUV más deportivo es peor dinámicamente que un coche menos enfocado al disfrute simplemente por su configuración, por su reparto de pesos (más alto) y por su aerodinámica, factor que inevitablemente ha disparado el consumo de nuestra prueba -a ritmos muy altos por autovía- hasta los 13,5 litros de media, lo que unido a un depósito pequeño, obliga a frecuentes paradas.

En cualquier caso, ni siquiera con el coche bien apoyado, pasando sobre rizos y badenes en el asfalto a ritmo de coche robado, el Kona N se descompone o hace extraños, pero los ocupantes -especialmente los de atrás- echarán de menos de menos mucho confort.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-48

Las suspensiones son muy duras y de recorrido muy corto, aunque los fantásticos asientos de conductor y copiloto (que estéticamente no son nada del otro mundo, pero como deportivos cumplen muy bien) sorprendentemente permiten hacer largos cruceros sin fatiga, especialmente si usamos alguno de los modos de conducción más relajados (ECO, Normal…).

Hablando de esto, entre modos hay poca diferencia de comportamiento, y nunca llega a ser un coche totalmente cómodo aunque lo busquemos. Por el contrario, mención especial a todas las posibilidades de regulación que ofrece el modo N (motor, cambio, diferencial, suspensión, escape…) y, sobre todo, a toda la información que podemos disfrutar en su pantalla central: desde parámetros del coche hasta circuitos del mundo entero, por si nos inscribimos a un trackday.

Atrás, la queja más habitual es referente a lo directo de la dirección, que hace que los cuerpos se zarandeen, a los ruidos aerodinámicos en general y, en particular, -no queja sino comentario- al ruido a «turbina» que se escucha al acelerar a fondo en cualquier marcha o velocidad.

Para la sesión de fotos descargamos el coche de maletas y acompañantes y nos vamos nuestro fotógrafo Paco y yo en busca de una carretera de curvas donde hacer algunas pasadas. Quitar cerca de 200 kg a los casi 1600 kg declarados hace al Kona N un coche más rápido y directo, y salir de las curvas lentas es fácil y efectivo a partes iguales gracias a un autoblocante que se hace sentir en todo momento (algo que nos gusta) pero que no nos complica la vida en exceso.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-16

Es en estos momentos, haciendo varias pasadas por un mismo tramo, cuando puedes empezar a saborear mejor un coche con unos niveles de adherencia y unas capacidades tan altas. El coche corre mucho, y en carreteras reviradas puedes seguir sin problemas a coches mucho más potentes y, a priori, rápidos. El paso por curva es muy alto, el límite llega solo cuando las cosas se están empezando a desmadrar y – sorprendentemente- hasta nos damos un susto frenando en apoyo, en bajada, cuando el culo trata de adelantarnos, algo que el i30 N no hace al ir el tren trasero más sujeto.

El subviraje en general es mínimo, al igual que el balanceo de la carrocería o que la deriva del neumático de perfil 40 (235 / R19), lo que nos mantiene siempre bien informados de lo que sucede bajo nuestras manos y pies.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-5

El susto no se debe a que el coche sea peligroso per sé; creo que la puesta a punto está todo lo afinada que puede estar en un coche así. Simplemente lo hemos subestimado, y nos demuestra que un coche duro, con mucha goma en contacto con el suelo, con 280 cv y autoblocante puede morder si no lo llevamos como debe llevarse.

Aquí no vale todo. Las cosas se mueven muy rápido hacia nosotros con esa potencia y, sobre todo, cuando el coche pierde adherencia, lo hace de forma muy rápida y con poco preaviso, como es lógico en un coche con una puesta a punto tan deportiva. En este caso el ESP ha venido a echarnos un cable en el momento perfecto.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-7

Pensábamos que por ser SUV (o Crossover) estábamos ante una abuelita de la caridad y no es así: el Kona N es un atleta de élite, capaz de correr los 100 metros lisos o hacer salto de longitud con registros de medalla de oro, pues tiene los genes adecuados para ello: un motor 2.0 turbo que empuja mucho (a partir de 3000 rpm), un cambio que funciona a la perfección (al nivel de los mejores) y un chasis puesto a punto en Nürburgring por los ingenieros de Hyundai, que han demostrado con sus i30 e i20 N que de hacer coches rápidos, efectivos y divertidos saben un rato.

La única pega de este atleta es que todo lo que hace, lo hace con una mochila de plomos en la espalda (altura y peso). Quedaría el último compitiendo contra compactos deportivos de similar potencia, pero seguiría siendo mejor que el 95% de los coches de la carretera. Y de hecho lo es.

Quedaría el último compitiendo contra compactos deportivos de similar potencia, pero seguiría siendo mejor que el 95% de los coches de la carretera. Y de hecho lo es.

Y además es un coche honesto, porque ya desde que lo ves por primera vez, no oculta sus intenciones: enormes escapes, apéndices aerodinámicos, entradas de aire, lips y spoilers, llantas que llenan a la perfección los pasos de rueda y que ocultan unos frenos que podrían ser el único punto mínimanete criticable cuando las cosas se ponen serias. Y cuando digo serias, me refiero a SERIAS: el equivalente a hacerte 4 o 5 vueltas en un circuito sin dar respiro a los frenos.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-59

En general se puede decir que tiene un tacto correcto – siempre me he preguntado por qué no pueden tener todos los coches el tacto de un Porsche- y aguante más que suficiente en todas las circunstancias, pero en este caso, a este ritmo, notábamos que el pedal se hundía un poco más de lo que nos gustaría.

No es que el coche no pare, sino que nos resta confianza para seguir empujando. Pero que conste en acta: estamos hablando de un abuso descarado que, por cierto, ni neumáticos, motor o cambio (automático doble embrague de 8 velocidades) han acusado lo más mínimo, muestra de que es un coche al que le puedes «zurrar» sin tener la sensación de que se te vaya a deshacer entre los dedos como una magdalena seca (y créeme que los hay así).

Hyundai Kona N - 8000vueltas-6

Pero me vuelvo a preguntar, ¿Quién es el potencial cliente de este coche? No discuto que por el precio que pagas te den un pack completo si buscas diversión al volante, pero tienes más y mejor en el i30 N; si necesitas un SUV o Crossover porque debes conducir ocasionalmente por pistas, no creo que el Kona N sea la mejor herramienta; si eres un «chaval», pues te puede encajar, pero tienes que «soltar» 40.000 € cuando un i20 N -de dimensiones interiores parecidas y dinámicamente más sano, aunque más lento- cuesta 13.000 € menos.

Quizá solo si eres un «veterano» y necesitas un coche alto para entrar o salir te encaje el Kona N, aunque si estás acostumbrado a cierto «nivel», al cual ya puedes acceder con ese dinero, los materiales de su interior son bastante decepcionantes…

Así que tras darle muchas vueltas, he llegado a la conclusión de que quizá la cuestión sea que deberíamos dejar de preguntarnos por qué y pensar en por qué no, y que al que le guste y le encaje, se lo compre y punto. Porque se lleva un coche ciertamente extraño, pero igualmente rápido, deportivo, divertido y además, diferente (y alto para entrar y salir, si eso te sirve de algo).

Yo, cuando vea uno por la calle, me alegraré de que se sigan construyendo y vendiendo buenos deportivos, que es de lo que se trata.

Hyundai Kona N - 8000vueltas-4

Fotografías realizadas por Francisco Carvajal, toda la galería disponible en nuestro Flickr.

Artículos relacionados

8 comentarios en “Prueba Hyundai Kona N: ¿Para quién?”

  • Staff

    delarosa

    18 de enero de 2023 a las 14:06

    Probablemente sea un gran coche y probablemente no me lo compraría nunca mientras no me hiciera falta un SUV. Menos mal que algunas marcas siguen sacando coches con ese tacto deportivo. Coches provocadores, y no solo por estética sino también porque te empujan a pisar el acelerador y sacarle las cosquillas al motor. Está claro que no vas a llevarte un premio al consumo con este coche pero seguro que te saca una sonrisa.

  • Deivid Torrepower

    20 de enero de 2023 a las 15:52

    Nótese en tono jocoso, pero el encaje de este artículo en esta web quizás sea lo mas cerca de unos cuernos que he sufrido nunca.

    Estando de acuerdo en todo, mentalmente en el final de cada frase no podía dejar de añadir un «pero vas sentado igual que en la silla del comedor de tu casa». Y estar sentado con la espalda recta, a 90 grados cadera y rodillas, es lo último en cuanto a sensaciones deportivas que se me ocurre.

    A su vez, mirar por la ventanilla, que te queda bien por debajo del hombro, y ver el suelo muy lejos resta muchos… resta todos los enteros en cuanto a deportividad y sensaciones.

    No creo que esté siendo un pureta, ni tampoco tacho al Kona como mal coche o producto (de hecho opino lo contrario hasta el punto de ser en parte responsable de la venta de una unidad), pero tanto se amplia el espectro de la prostituida palabra «deportivo», que a día de hoy mi ex-106 1.5 diésel quedaría englobado bajo este paraguas. Y no, por mucho que bajase Tudons (porque subir olvídate) metiéndome en las horquillas a «lo cangrejo», en el conjunto global aquella chatarra no era un deportivo pese que eventualmente llegara a brindar dichas sensaciones.

    Con todo esto el Kona protagonista, pese a que sea un misil con 4 ruedas, en global no tiene tintes deportivos aunque eventualmente te deje pegado al asiento o pueda parecer que recorre rápido las curvas.

  • nachetetm

    8 de febrero de 2023 a las 12:41

    ¿Quién nos iba a decir años atrás que las marcas más interesantes de la década de los 20 serían las coreanas?

  • Mileston

    8 de febrero de 2023 a las 17:54

    Pues da la casualidad de que el otro día me llevaron en uno y me pareció una locura de coche. Duro como una tabla y ridículamente deportivo. La verdad es que me gustó bastante, no me lo esperaba para nada.

    Y me pareció que corre casi lo mismo que mi Macan…

  • Pit AMG

    8 de febrero de 2023 a las 17:56

    Cuanta razón @nachetetm, de lo más interesante que hay ahora mismo en casi cualquier gama (utilitarios, económicos, «hot hatch») los koreanos tienen algo que decir, con buen chasis, buen equipamiento y buen precio. Aunque como suele pasar, a media que suben en tamaño se ven incapaces de competir contra los premium de BMW, Audi o Mercedes. El KIA Stinger es un gran ejemplo de ello, un buen coche que me temo pasó sin pena ni gloria…

  • Alez

    8 de febrero de 2023 a las 17:57

    Por muy bueno que lo pongáis (o que sea, que no dudo de vuestro criterio) creo que se venderán poquitos porque habéis dado en el clavo con el artículo. ¿Quién se lo compraría?

  • Prueba CUPRA Ateca 300 cv: ¡Que lo disfrutes! – 8000vueltas.com

    13 de junio de 2023 a las 16:16

    […] un segmento que nos enamore en este blog. Pero algo por dentro nos dijo que, habiendo probado el Hyundai Kona N y con la aceptación que tienen en nuestros días los SUV (el segmento SUV […]

  • Prueba CUPRA Formentor VZ5 (390 cv) - Automundo360

    17 de abril de 2024 a las 01:11

    […] deportivo, o por lo menos que no te va pidiendo guerra a cada kilómetro (como sí lo hacía el Hyundai Kona N, un crossover tan radical que no tenía sentido alguno, aunque la verdad es que nos encantaba) hace […]

Deja un comentario