Me lo compro, este es el mío.

Algo así pensé cuando vi esto, mi 944 Turbo que aprovecho para presentaros.

Porsche 944 Turbo, a partir de 8.000€

Si ya habéis pasado por la primera parte del proceso de compra, lo que toca ahora es hacer papeleos, algo nada interesante. Básicamente, lo que tienes que hacer es:

Contrato de compra venta. Se rellena por ambas partes y se firman dos copias. Una para el vendedor y otra para el comprador. Hay modelos ya redactados que puedes adquirir en cualquier estanco.

Cambio de nombre. Hay que ir a tráfico y solicitar el cambio de nombre del vehículo. Vas a necesitar ir con el vendedor o llevar una copia de su DNI, el contrato de compra venta firmado y un documento que te darán en la gestoría autorizando el cambio de nombre (si te encargas tú del cambio de nombre es posible que necesites la copia del DNI compulsada y un escrito autorizando al cambio firmado por el vendedor)

Contratar un seguro. No necesita más explicación, pero debes hacerlo con cierta previsión.

Pagar. Lo más habitual, si no es una cantidad muy elevada, es pagar en mano en el momento en el que te llevas el coche. Así se evita mucha picaresca.

Lotus Elise, a partir de 15.000€

Actualmente la ley no nos permitirá hacerlo en caso de que no seamos particulares tanto comprador como vendedor. Además, si eres el vendedor, es recomendable pedir que el comprador firme un documento confirmando que se hace cargo del vehículo a partir de la fecha tal y hora cual, para evitar que te lleguen multas, como mínimo, si el cambio de nombre no se hace en el momento.

Todos estos trámites requieren varios días. Esto es un problema si, por ejemplo, te cruzas el país para ir a ver un coche en fin de semana porque las asesorías, tráfico y los bancos estarán cerrados. Prevé esto (también te pasará con el taller donde quieras hacer la revisión). En algunos casos también habrá que pasar la ITV, ya que es necesario que el coche tenga la ITV al día para poder hacer el cambio de nombre.

Lotus Elan, a partir de 8.000€

Ya tengo el coche, ¿y ahora qué? Lo primero es llegar a casa. No serías el primero ni el último que llega en grúa con un coche que parecía estar perfectamente. Si se da esta desafortunada situación, casi te recomiendo (lo digo en tono jocoso) que la grúa te lleve a la casa del vendedor y le dejes el coche en la puerta mientras le pides amablemente que te devuelva el dinero. Aun así no te asustes, estas cosas pasan, pero pocas veces, y suelen tener solución. Por lo general, acabaremos el viaje sin problema pero no descartes sorpresas. Cuando llegues a casa mételo en el garaje y déjalo ahí. En serio, déjalo ahí, aunque todo haya ido como la seda. Durante los primeros días con un coche, cualquier detallito que le pase en tu cabeza parecerá un desastre.

Lo primero que debes programar es una cita con tu mecánico. Que le haga una revisión (sí, otra) y que le cambie todo lo que necesite. Algunas cosas ya las habrás visto tú o el mecánico que haya hecho la revisión pre-compra pero, quizá, tengas algunas cosillas que no hayas previsto: cambio de aceite, líquido de frenos y líquido de caja de cambios son casi obligatorios, salvo que tengas facturas que digan lo contrario. Ídem con la distribución si es un coche peculiar en este sentido.

Subaru Impreza GT, a partir de 5.000€

Por mi propia experiencia, no es recomendable llegar con el coche y decirle al mecánico que le haga una revisión y que le cambie lo que sea necesario, es muy probable que la factura se dispare. Lo mejor es que lo revise y te diga lo que ha encontrado, te haga un presupuesto detallado (y por escrito) y, a partir de ahí, en frío, tú decides qué se hace y qué no. No es que el mecánico no sepa lo que tiene que hacer, es que su criterio y el tuyo pueden ser muy dispares. En un coche de 20 años siempre hay cosas que hacer (siempre significa siempre, pero esto no debe desanimarte). Lo esencial es que mecánicamente esté bien, ten claras tus prioridades.

Mazda RX-8, a partir de 6.000€

Regálale una buena limpieza, por dentro y por fuera. Aparte de lo evidente es probable que si le das una capa de cera a la carrocería, limpias bien todo por dentro, hidrates el cuero si lo trae y, en general, le das un repaso el coche luzca el doble de bien. Recuerda limpiar el vano motor: en una tarde, con paciencia, puedes hacer que luzca como nuevo. Aprovecha para revisar manguitos y con un destornillador comprueba cada tornillo que veas (seguro que puedes apretar más de los que imaginabas). Desmonta las moquetas para aspirarlas y revisar todo lo que hay por ahí abajo: óxidos, marcas de algún golpe, sustancias de dudosa procedencia, etc. Sanéalo todo bien, vuélvelas a poner y olvídate de lo que hay ahí abajo por mucho tiempo.

Audi S2, a partir de 3.500€

Ahora llegan las dudas. ¿Lo dejo de serie? ¿Le cambio cosas? En el equilibrio está el gusto. Si has comprado una buena unidad es buena idea no cambiarle muchas cosas y disfrutarlo, al menos al principio, del coche tal cual se vendió. Con el tiempo puedes ir mejorando lo que veas más necesario: suspensiones, líquido y pastillas de freno, mejores neumáticos (y unas bonitas llantas de la época si no es un clásico). Tienes toda la información que necesitas en el artículo Empezar a preparar un coche: guía básica. No macarrees el coche, cuídalo y respétalo. Sin embargo, no debes renunciar a darle un toque racing si eso es lo que te gusta.

Ahora bien, todo el dinero que inviertas en el coche se irá con el coche cuando lo vendas (nadie va a pagarte lo que te has gastado ni a compensarte por horas y horas de búsqueda de piezas, preocupaciones y visitas al taller) o si tienes un percance. Sin embargo, si inviertes el dinero en ti, como conductor, esa inversión la rentabilizarás el resto de tu vida (Ver Extra Lap)

Honda S2000, a partir de 13.000€

Una vez que tengas todo esto hecho ya puedes salir a disfrutar de tu coche. Busca una carretera solitaria y revirada y explora las posibilidades de tu coche, ve poco a poco y no te confíes que los coches con años no perdonan. Aprende todo lo que puedas, conoce bien tu coche y disfrútalo.

Bueno, con esto creo que ya sabes todo lo que tienes que saber para comprarte un coche. Quizá ya hayas hecho tus números y cábalas varias para elegir un ganador, mal hecho. En la próxima entrega daremos una vuelta más de tuerca y buscaremos los coches deportivos que interesan en 2012 a un precio razonable, quizá cambies de opinión.

Replica Lotus Seven, a partir de 15.000€ (ojo que aquí hay diferencias abismales entre modelos)

Extra Lap

Si nunca has hecho un curso de conducción, deja de leer y vete ahora mismo a hacer uno. Empieza por el principio: seguridad. Si no sabes hacerlo, NECESITAS aprenderlo: dinámica básica del vehículo, frenar con y sin ABS, controlar un sobreviraje, frenada asimétrica, etc.

Lo segundo, si te has inclinado por un coche con la intención de darte alguna alegría al volante, es un curso de conducción deportiva. Sí, ya lo sé, eres un Fernando Alonso al que nunca le dieron la oportunidad; razón de más para meterte en un circuito y aprender. Lo primero que has de aprender es que no sabes conducir, en el 90% de los casos  se cumple. Cuanto más consciente seas de tus limitaciones más rápido aprenderás a ir deprisa.