Ayer, 6 de Abril, comenzó oficialmente la temporada de Drifting en EEUU, el campeonato formula drift, que en los últimos años ha hecho sombra al mismísimo «D1 Series» de Japón, que originó este deporte como tal. Esta versión americanizada está hecha con un nivel mucho más profesional y una organización mucho más enfocada al aspecto mediático que el comparativamente casi amateur certamen nipón.
Resumiendo brevemente en que consiste, para los profanos a este deporte, el recorrido que se usa para los eventos de Drift, sea en Japón o en cualquier campeonato que yo conozca es un tramo de una sucesión de curvas de un circuito, pero nunca de una vuelta completa. Esto es porque consta de unos jueces que deben de poder ver claramente a los participantes en todo momento para poder evaluarles. Los participantes se puntuan por tres criterios básicos, velocidad, ángulo de deriva (o de derrapaje) y por último, estilo (cuánto de cerca han ido de los puntos de contacto marcados por los jueces, cuánto humo han generado, cómo de finos son con la trazada, cuánto de agresivos son con los cambios de dirección, cuánto de cerca han perseguido a su rival, etc). Todos estos criterios, objetivos o no, con los que los jueces han de contar a la hora de evaluar las actuaciones de los participantes.
El evento se divide en dos partes, primero una ronda clasificatoria para decidir los 32 mejores participantes que pelearán cara a cara por el triunfo. Al día siguiente comenzarán la competición como tal con un formato de rondas eliminatorias, enfrentando los primeros clasificados en grupos de dos y en los que se harán en principio dos pasadas. En cada pasada van alternándose las posiciones y el objetivo del que lidera es ser el más rápido, más espectacular y evitar que el perseguidor se acerque. Y en el caso del perseguidor, lo mismo, pero tratando de seguir al líder lo más cerca posible sin entrar en contacto con él. Si los jueces decidieran que ambas rondas han estado igualadas se procederá a una segunda ronda eliminatoria llamada «One more time» (o “Sudden death” en las D1 de Japón). Los que consigan pasar esta primera criba posteriormente entrarán en el Top 16, después al top 8 y así sucesivamente hasta disputarse el trofeo absoluto.
La primera prueba de la temporada 2012 se ha disputado en Long Beach, California, en la soleada Costa Oeste del continente Norteamericano. Una temperatura ideal de unos 25ºC y un sol radiante a medio día nos daban la bienvenida a una excitante temporada llena de cambios.
Uno de los más importantes es la introducción del nuevo modelo de Scion (la marca destinada al público joven de Toyota en EEUU) con su nuevo modelo, el FR-S (Toyota GT86 en el resto del mundo), del que se espera que pronto haya muchos competidores con este nuevo modelo. Pero las novedades son muchas más, desde otros modelos actualizados de la mayoría de los participantes a las nuevas normativas de cara a mejorar la seguridad en el habitáculo de los coches.
Por suerte para el espectáculo (clave en cualquier deporte que se celebre en este país) o por desgracia para los puristas, la tendencia hoy día es usar un chasis o carrocería de un coche japonés por su relativa sencillez, su amplio mercado de accesorios para su preparación, ligereza, facilidad de conducción y efectividad, tanto como su reducido coste; propulsado por un potente motor V8, normalmente de procedencia de la familia LS de General Motors, también favorito por básicamente los mismos motivos. Los equipos con menos apoyo económico siguen haciendo auténtincas virguerías para tratar de aguantar el tipo añadiendo turbos a sus modestos Toyota AE86, Nissan 180SX/200SX/Silvia (aquí en EEUU se llamaron 240SX, curiosamente siempre usando motores atmosféricos de serie) de todas las generaciones (S13, S14, S15).
Además, tenemos «raras avis» en forma de coches únicos no vistos en otros campeonatos de Drift, como el Saturn Sky (Opel GT en Europa), algunos Muscle Car como los Ford Mustangs y Chevrolet Camaros, y algún que otro Corvette. Y aunque pocos coches le hacen sombra al estruendo de los V8s americanos, ninguno resulta tan espectacular de escuchar como los rotativos de Mazda. El RX8 de Joon Maeng ensordece a cualquiera y ya puedes taparte los oídos en cuanto levante el acelerador, pues no sólo verás un llamarazo de medio metro saliendo del escape, además escucharás petardazos que te harán pensar que han disparado cañones. ¡Espectáculo en estado puro!
El acceso al evento es como no habéis visto en ningún certamen de nuestro país. Según pasamos las puertas no vamos a unas gradas destartaladas o a un descampado a intentar sentarnos y tratar de ver los coches con prismáticos, no. Según entramos nos vemos en medio del paddock, entre decenas de stands de publicidad mezclados con los camiones de asistencia y las carpas de los mismos equipos que veremos en unos instantes luchando encarnecidamente en la pista. Es realmente emocionante poder charlar cara a cara tanto con los integrantes del equipo como con los pilotos de manera amigable y en general se respira un ambiente sano y donde aun no se ha perdido el sentido del humor. Después de recuperarse de la impresión que causa ver a todos los coches de carreras que llevas viendo años en videos descargados de la red, conocer en persona a los pilotos que los llevan, e incluso entablar conversaciones con ellos como si fueran un aficionado más en un trackday; por fin pasamos a las gradas para ver pasar los primeros coches en la tanda de prácticas.
Si por una parte es bien sabido que todos los pilotos tienen buenas relaciones entre ellos en general; en la pista son tan agresivos y competitivos como en cualquier deporte del motor. Aquí se viene a ganar y nadie da tregua. Todos dan el máximo cuando el semáforo se pone en verde y en un deporte tan emocionante, el cóctel es apasionante y los que más ganan son los espectadores.
Fin de la sesión, y por suerte sin prácticamente ningún incidente. Se nota que el nuevo asfalto en lo que un día cualquiera es un parking descubierto hace que haya mucho agarre en la primera parte del trazado de las calles de Long Beach. Únicamente el salto de asfalto a hormigón estriado en la última parte de la horquilla ha sido donde se han visto trazadas y cambios de dirección menos «finos» de algunos corredores.
Los favoritos este año son muchos. Los cambios de monturas y reglamentación han hecho el campeonato muy interesante. La mayor novedad como comentábamos antes la pone el Scion FR-S de Ken Gushi, que hasta ahora no ha contado con un material realmente competitivo para demostrar de lo que es capaz. Por supuesto, tenemos al vigente campeón, Dai Yoshihara con su Nissan Silvia S13 con motor V8 y patrocinado por Discount/America’s Tire.
Desde Japón también, nos llega un nuevo “rookie” que no es nada novato en las series D1, Daigo Saito, con su monstruoso Lexus SC 430 de 1200 CV.
No podemos olvidar la legión de Muscle Cars encabezada con el popular y poco refinado Vaugn Gittin Jr en su Mustang Falken de 2013, que este año parece que por fin se ha puesto serio con su forma física y ha debido de perder por lo menos unos 30 ó 40 kg. Por lo que hemos podido ver hoy en las rondas clasificatorias, esta mejora no ha hecho si no reforzar su de por sí agresivo y competitivo estilo en pista dándole hoy un merecido tercer puesto. También tendremos que contar con su compañero del equipo Falken, Justin Pawlak con un Mustang similar al de Gittin, que si bien no despuntaba claramente en la competitiva jornada de hoy, parece bastante constante y con buenas líneas que le han dado hoy un digno cuarto lugar.
Además, en la armada americana tenemos también los Camaros de Conrad Grunewald (patrocinado por Hankook) y Tyler McQuarrie (con su principal esponsor, GoPro, llenándole el coche de cámaras). Ambos son rivales muy a tener en cuenta con actuaciones siempre muy competitivas y constantes.
Del resto de los equipos fuertes, están el neozelandés Rhys Millen con el Hyundai Veloster (segundo clasificado en la clasificación de hoy) y el irlandés Darren McNamara con su Saturn Sky con publicidad de Falken, con su estilo elegante y es además siempre un soplo de aire fresco ver como alguien se atreve con un modelo diferente de los requetevistos modelos japoneses o muscle car americanos.
No olvidemos al espectacular y ex-campeón de 2009, Chris Forsberg con su regordete pero competitivo Nissan 370Z naranja y su original casco pintado como el mismo Luke Skywalker de la guerra de las galaxias.
También está como punta de lanza de los rotativos el popular Joon Maeng con su RX8 negro de Lucas Oil preparado por Bergenholtz Racing. Pocos pilotos hay en este mundo tan accesibles como este simpático coreano que podemos encontrar entre semana entrenando en circuitos pequeños como el de Adams Motorsports Park en Riverside, siempre con una sonrisa y siempre dispuesto a charlar y firmar autógrafos para los fans.
Uno de mis preferidos de los equipos casi privados es Ryan Tuerck con su modesto pero espectacularmente rotulado Nissan 240SX (S13) de Retaks. Especialmente después de una primera ronda de clasificación que quitó el hipo a todos. Tuerck, hizo una pasada casi perfecta con 97 puntos (en modesta opinión del que suscribe, si bien su estilo, cambio de apoyo y líneas dejaban sin habla, le faltó algo de distancia para acercarse al punto de contacto («clipping point») en el exterior de la curva larga para hacerla de 100) y después de la cual nadie logró mejorar en la segunda ronda, dándole así el “primer puesto” para el día de mañana.
Y esto es todo del primer día de competición oficial. Esperamos que lo hayáis disfrutado y trataremos de ofreceros un reportaje interesante del día de la competición lo antes posible
Javier
8 de abril de 2012 a las 13:46Un apunte, el japones del Lexus sc se llama Daigo Saito!!
mncls
8 de abril de 2012 a las 16:45Bfff cómo me gustaría ver esa competición en directo.. Me ha hecho gracia el Toyota iQ recortado.. xd En cuánto al GT86 es brutal, pero es curioso que aún no haya visto ninguna preparación del BRZ, siendo gemelos ambos..
Saludos.
delarosa
8 de abril de 2012 a las 20:49Vaya, vaya, como se lo pasa nuestro corresponsal en USA.
Estoy deseando ver el resto del reportaje y la galería completa de fotos.
Se nota que la organización es totalmente profesional y que mueve una cantidad considerable de sponsors.
a ver cuando llegamos a este nivel, o parecido, en nuestro país.
Jorge Azcoitia
8 de abril de 2012 a las 23:24@Javier
Muchas gracias, vamos a editar el texto para pulir ese y algún que otro detalle. Esperamos que os guste.
@mncls
Efectivamente, el FR-S de Greddy es el único por ahora, porque es el equipo oficial de Scion (Toyota) y han tenido acceso a una carrocería meses antes de que nadie ni si quiera hubiera visto el coche. A propósito de esto, tuve la suerte de ver en exclusiva el coche en vivo recién terminado en la nave de Greddy la misma semana que se vieron las primeras fotos del modelo de producción.
JimmyFloyd
9 de abril de 2012 a las 13:53Espectacular! Oye no tendrás por ahí a mano un calendario del campeonato. Tengo planeado un viaje a USA en unos meses y ver algo así puede redondear la experiencia.
JimmyFloyd
9 de abril de 2012 a las 14:00Vale, acabo de ver el calendario en el primer link de la entrada… la próxima vez no seré tan capullo.
Formula D Long Beach, el espectáculo del drift – 8000vueltas.com
15 de agosto de 2017 a las 23:20[…] otro día os hicimos una introducción a la Formula D, para poneros los dientes largos y daros a conocer, si alguno no lo conocía, esta […]