Un jueves por la mañana no suele ser un momento especial. Puede que llegue al trabajo con un poco de energía extra porque la semana ya empieza a mostrar su fin, sin embargo, hay gente que está disfrutando de otras cosas, otra vida. Hace un par de jueves tuve la suerte de vivir uno de esos días diferentes.
En carreteras perdidas y vacías de coches, rodeado de salvaje naturaleza, pasando por pequeños pueblos que parecían haber detenido el reloj hace 40 años y respirando la tranquilidad de la España vacía, que está mucho más cerca de lo que crees.
Los jueves son días anodinos, hasta que llegas -por ejemplo- a un afterwork 8000vueltas. Pero eso no pasa todos los días. Y este jueves pude vivir las dos cosas juntas, un orgasmo de coches.
Pero empecemos por el principio. BMW y MINI me convocan en el circuito del Jarama para probar sus joyas de la corona: el BMW M2 CS y el nuevo MINI GP. Unos coches así merecían algo especial. La presentación fue sencilla: siguiendo un riguroso protocolo COVID sólo fuimos 4 medios y un reducidísimo equipo de trabajadores de BMW. Coffee, briefing and let’s go!
Tras conocer las características técnicas del CS y las características técnicas del MINI GP, nos subimos una persona por coche y nos disponemos a hacer dos rutas de una hora cada una. A mí me toca la primera con el MINI y la segunda con el BMW M2 CS.
Hace muchos años que no me subo a un MINI y más aún a un MINI GP (¡6 años ya!). Tengo un recuerdo imborrable del MINI GP R56 que probamos en 8000vueltas. Un coche deportivo, divertido, excitante. Tanto, que lo metimos en el Top 3 de las mejores pruebas 8000vueltas.
El nuevo MINI va a tener que ser un coche excepcional para mejorar a su anterior generación. A priori van a tener que ser dos coches muy diferentes, los 306 cv de este nuevo MINI GP le colocan en otra órbita. Arranco y recorro los primeros kilómetros por autopista, un coche rápido (muy rápido) de suspensiones duras pero no demasiado incómodo y con un sonido bonito.
Pienso que este MINI no tiene ese borboteo tan acusado a bajas vueltas que tenían otras versiones anteriores. Por otro lado, aunque eran divertidos, en el fondo lo agradezco: realmente sólo valía para hacer el macarra en ciudad. Me gusta que los coches suenen y petardeen pero no que sólo ocurra a 2.000 vueltas de manera artificial y que cuando les pisas el sonido se desvanezca. No es el caso, y eso que todavía no lo he probado en carretera de curvas.
Llego a un tramo olvidado del rally de Madrid siguiendo el navegador y, tras una parada para hacer fotos, me dispongo a probarlo de verdad. Primera curva, piso fuerte el acelerador a la salida y… un subviraje de espanto, un latigazo del volante y el coche recupera la compostura. ¿Qué ha pasado? Bueno, supongo que le he pisado con demasiada alegría, los neumáticos semislick están fríos… no lo sé.
Yendo con más tiento empiezo a enlazar curvas y me doy cuenta de que es un coche rapidísimo, un auténtico tirachinas que devora los escasos metros que hay entre dos curvas en este tramo tan revirado. Noto la acción del autoblocante, es un coche nervioso, de esos que no puedes conducir sin llevar bien agarrado el volante en todo momento. Acabo el tramo y llego a una carretera de enlace.
Durante esa carretera tengo que realizar un adelantamiento a un camión. A 80 km/h empiezo a acelerar fuerte en 4ª: comienzo la maniobra y… latigazo de la dirección hacia la izquierda. No pasa nada, lo corrijo y termino la maniobra pero me quedo desconcertado. Este MINI me parece impredecible para un novato. Todo coche requiere cierto tiempo de adaptación pero cuando tienes que hacer una prueba de un coche en una hora, tienes que «aprender» muy rápido. Un usuario normal no debería tomarse las cosas con prisas sino ir disfrutando poco a poco su coche nuevo, pero no siempre las cosas son así. Este coche no perdona despistes.
En el siguiente tramo vuelvo a disfrutar de la mejor cara de este MINI GP. Buena frenada, excelente chasis y mucha potencia. Una vez que te acostumbras a los tirones que el autoblocante produce en el tren delantero (no es fácil pasar 300 cv con turbo al suelo con solo 2 ruedas motrices) te empiezas a sentir a gusto. Piensa que este coche tiene más caballos que los míticos Kit Car de 2 ruedas motrices que competían en el mundial de rallyes: Megane, Xsara, Ibiza, 306 Kit Car…
El GP tiene una dirección, casi, de coche de carreras, por increíble que parezca. Toda la vida he leído sandeces de coches que parecen un kart y frases similares pero en esta ocasión no es una licencia creativa. El tren delantero monta un autoblocante tipo TORSEN tarado al 31% en aceleración, algo poco común en los tiempos que corren. El R56, por ejemplo, en su lugar montaba un «diferencial» electrónico que recurría a los frenos para controlar la tracción. Para ello, montaba unas gigantescas pinzas de 6 pistones que, además de pesar más, sufrían de lo lindo si te pasabas de la raya con el pedal derecho y también con el del freno…aunque cuidándolas cumplían muy bien.
En este caso, el autoblocante actúa con fuerza sobre la dirección. Cuando vas al límite en apoyo en plena curva, empiezas a divisar la salida y pisas el acelerador, las ruedas delanteras «te meten» en la curva traccionando de forma salvaje, en contraposición a lo que haría un coche sin autoblocante, los cuales tienden a quedarse en el sitio patinando o abrir la trazada.
Cuesta un poco cambiar el chip porque va contra el comportamiento normal del típico tracción delantera, pero funciona, vaya que si funciona. He tenido la oportunidad de probar un MINI Challenge (un coche de la copa de circuitos) con un diferencial similar y el comportamiento era muy parecido, con esos tirones de la dirección en las curvas cuando empezamos a acelerar. El problema es que en carreteras en mal estado se hace complicado incluso mantener el volante recto cuando vas pisando a fondo. Hay que sujetar fuertemente el volante para evitar llevarte un susto.
Algo que eché de menos es la agilidad del MINI GP anterior, en el que podías entrar en las curvas «barriendo» con la zaga, una sensación muy poco habitual en un delantera, sólo reservada a los chasis más afinados. Todavía eché más en falta tener una caja manual de 6 velocidades. En este caso tenemos un convertidor de par de 8 marchas que obliga a resetear nuestra mente: me encuentro en un tramo en el que casi todas las curvas son de 3ª, incluso 4ª, por lo que tenemos que olvidarnos de mirar en que marcha vamos y conducir «a sentimiento».
Estas cajas de cambio son estupendas, me gustan mucho, pero para coches con un planteamiento mucho menos deportivo. Para mi un MINI GP no debería montar una caja así, aunque, por otro lado, creo que resultaría un coche muy difícil de conducir rápido con un cambio manual (y quizá un tanto anacrónico).
En cualquier caso, el funcionamiento es muy bueno, no nos equivoquemos: es un cambio rápido y que permite ir a muy buen ritmo (en modo manual), aunque es cierto que se pierde conexión con el coche, con la conducción. Es una experiencia que no está completa y, en un coche así, no puedo estar de acuerdo con esta decisión. Las cajas manuales son un reducto para los más quemados, pero este es un coche que va enfocado precisamente a ellos.
He de confesar que tengo la sensación de que me faltó tiempo para adaptarme al coche. Es cierto que, tras haber probado un abanico tan grande de deportivos en estos 13 años que llevamos escribiendo en 8000vueltas, me adapto muy rápido a cualquier coche de calle pero, en esta ocasión, me ha costado. Espero poder probarlo de nuevo con más calma, quizá mis conclusiones sean otras.
Tras llegar al punto de reunión que cerraba la primera parte de la ruta tuve tiempo para digerir un poco estas sensaciones. Estaba con el pulso acelerado, nervioso. Eso no lo puedo negar, el coche me tenía impactado, es una auténtica montaña rusa. Pero ahora me espera algo muy diferente: manual, trasera… la última evolución del BMW M2, la versión CS.
Desde que BMW ha puesto turbo a los motores M, para mí, las cosas no son como antes. Los primeros BMW M3 y M4 me parecieron coches muy complicados de conducir al límite, con una respuesta de motor que no me gustaba y con una filosofía mucho menos deportiva que los atmosféricos. Por supuesto, son rapidísimos, pero la deportividad es una cuestión no sólo de eficacia (son mucho más rápidos y mejores en todo) sino de sensaciones y disfrute.
Personalmente, siempre me ha gustado más el M2 que el M4. Un poco más pequeño, un poco más ligero y un poco más moderno y con mejor tacto de acelerador y dirección. Es cierto que los primeros M2 tenían un motor menos conseguido que el del M4 (incluso se calentaban en circuito) pero con el M2 Competition se dio un gran paso adelante.
Después del Competition probamos una unidad cargada de accesorios Performance y ahora llega el CS. La lista de pruebas del M2 la puedes ver aquí:
Prueba BMW M2 Competition Performance
¿Será el BMW M2 CS el mejor M2 de la historia? El tiempo lo dirá, de momento en 8000vueltas ya hemos podido probarlo:
Me subo al coche con ganas de conducir más. Está siendo una mañana increíble: buen tiempo, carreteras casi desiertas y unos coches que todo el mundo quiere probar.
Coloco el asiento, los espejos y ajusto las opciones de conducción: dirección, respuesta del motor y, por primera vez en un M2, suspensión: escojo el modo Sport para todos. El Sport Plus en carreteras como estas puede ser complicado de gestionar. Los asientos son muy cómodos y recogen muy bien, en la primera curva ya me doy cuenta. El tacto del cambio y de los pedales es muy BMW, nada especial pero tremendamente efectivo cuando quieres ir rápido.
En el MINI hablaba de adaptación pero en el M2 CS eso no me hace falta. Quizá porque he llevado muchos BMW M2 (recuerda que hace poco hicimos una prueba muy completa del MICHELIN Track Connect a bordo de un BMW M2 Competition en el Circuito del Jarama) o quizá porque es así de intuitivo. En 3 o 4 curvas ya me sentía conectado con el coche. Y no porque tuviera Wifi o estupideces que nos tratan de vender los departamentos de marketing, sino porque el coche reacciona como esperas: es noble y progresivo, se puede dosificar el gas con el pie derecho y los controles están tarados de manera que puedas disfrutar.
Con esto podría dar por concluida la prueba, ¿qué más puedo decir de un coche deportivo? Si te subes a él y te sienta como un guante es que alguien ha echado muchas, muchas horas de desarrollo. Si os soy sincero, no sabía qué diferencias hay con un M2 Competition «normal» y estaba un poco perdido con tanta versión del M2, pero me ha parecido que iba realmente bien, una diferencia muy notable con el resto de BMW M2 que había conducido.
Empecé a conducirlo sabiendo lo siguiente:
- Tiene 450 cv, 40 más que el Competition
- Lleva capó, tapa del maletero y varias piezas más en fibra de carbono (techo, espejos, lip, alerón trasero…)
- Supera los 100.000€
Creo que ninguno de estos factores van a hacer que sea mejor coche para ser disfrutado, así que, tras la prueba, tuve que investigar un poco más. Para ser sinceros, también llevaba un equipo de frenos M de carburo de silicio reforzado con fibra de carbono opcional de 10.000€ (WTF!?). Eso sí se tiene que notar un poco, desde luego no noté falta de frenada en ningún momento.
Entre el equipamiento de serie viene un juego de MICHELIN Pilot Sport Cup 2, un neumático que hemos probado en múltiples ocasiones y que, personalmente, me parece el mejor semi-slick «para todo». Si entras a menudo con tu coche en circuito es la mejor opción que se me ocurre. En el M2 CS destacan con un grip enorme para carretera abierta, es difícil hacer perder la compostura al BMW con tanto agarre. Sin embargo no resulta crítico cuando comienzas a rodar, aunque no estén en la temperatura óptima. En este sentido mejoran a sus antecesoras, que cuando estaban frías, o en lluvia, resultaban peliagudas.
Una cosa que me ha encantado de este coche es que no me ha parecido incómodo, ¡nada incómodo!. Recuerdo el BMW M4 GTS que era un coche duro de narices (en la prueba lo tildamos de excesivo). Y el BMW M4 CS, que me pareció muy hardcore para el día a día. Curiosamente, un BMW M2 CS manual me pareció cómodo, dócil y utilizable. Enlazando curvas con la ventanilla abierta para escuchar el sonido del escape (porque en este coche sí hay sonido de escape, aunque tampoco es algo memorable) me imagino teniendo este coche en mi garaje, saliendo a disfrutar con él. Es algo que me pasa con pocos coches pero la conexión con el M2 CS ha sido instantánea.
Los controles están activos pero, si no pecas de optimismo, puedes ir rapidísimo sin que tengan que actuar. La puesta a punto me parece deliciosa en ese sentido. Tanto suspensiones como dirección trabajan muy bien y, no sólo eso, comunican al conductor lo que está pasando, lo que el coche quiere del piloto. No es algo fácil de encontrar en 2020.
Estoy deseando poder rodar con este coche en circuito, que adelanto que va a ser algo muy difícil de conseguir, pero me da la sensación de que lo he probado en su verdadero elemento: carreteras de curvas olvidadas.
Dejo caer que ha hecho un tiempo en Nürburgring de 7:42 (cosa totalmente irrelevante cuando hablamos de disfrutar pero que es un tiempazo. Mismo segundo que un 997 GT3, un Cayman 981 GT4 o un Murcielago 670-4 SV) en BMW me da la impresión de que se han centrado en hacer un coche para disfrutar al volante, un arte casi olvidado.
El interior es muy acogedor, vas rodeado de alcántara, con mandos manuales, buenos asientos… cuando se quieren hacer las cosas bien se nota.
Cuando me doy cuenta ya se ha acabado el segundo tramo y, hoy, mientras escribo (podría ser jueves, es un día cualquiera entre semana) parece que lo haya soñado. Otro día anodino de oficina, nada que ver con el disfrute y la adrenalina de una mañana probando estos dos coches.
Para más inri, el fin de fiesta era en el Jarama, dónde debía devolver el coche. Cuando llegué al circuito faltaban escasos minutos para que empezase nuestro último afterwork, así que ya os podéis imaginar el revuelo que levantó esta unidad tan especial entre nuestros clientes (había, al menos 4 BMW M2 rodando ese día).
De ese jueves me llevo un gran recuerdo como experiencia de conducción, con ambos coches, pero sólo hay un ganador. Un, para mí, claro ganador: me ha gustado mucho más el M2 CS. Precios aparte, planteamientos diferentes, distinto publico objetivo… si me pudiera llevar uno a casa sería, sin duda, el M2 CS.
Ahora bien, cuesta 104.000€. Entra claramente en territorio Porsche, concretamente en el Cayman GT4 con el motor 4.0 (que es 10 segundos más rápido en el Ring, irrelevante por otro lado, como os decía, pero que parte de los 110.000 €), un terreno peligroso si pretendes vender un coche deportivo.
Los primeros M2 costaban algo más de 60.000€ y estamos hablando, casi, del doble. ¿Se puede justificar esa diferencia de precio? ¿Merece la pena? Está claro que sólo unos pocos van a poder hacerse con una de las 75 unidades que se venderán en España y estoy seguro de que durarán muy poco, hay clientela muy fiel a BMW que no quiere perderse el que es claramente el mejor M2, por lo que será difícil acceder a uno. Lo que no sabemos es si esta será la última iteración del M2 o si en un futuro veremos un M2 GTS, CSL o similar. De momento no hay nada previsto.
Y tú ¿Comprarías uno?.
nachetetm
23 de septiembre de 2020 a las 19:48Yo lo tengo clarísimo. Si me toca el gordo de lotería, mañana me voy a BMW y me compro un BMW M2 CS (o un competition) antes de que los reemplacen por cualquiera de los engendros que están sacando últimamente. Y luego me voy a Porsche y me compro un Boxster GTS o un Spyder (si todavía se puede). Y con eso, y algún Ferrari clásico (probablemente un 355 GTS) me retiro del mercado automovilístico. No necesito más ni creo que vaya a aparecer nada mejor en los años venideros.
Ps. Menuda castaña el Mini ese, ¿no? ¿Convertidor de par y latigazos de dirección? ¿Cómo han podido perder tanto el norte en BMW?
Patabrava
24 de septiembre de 2020 a las 00:29Del M2 CS:
Todo bien. El coche no tiene la culpa de que se hagan pocos y sean caros de adquirir.
Respecto del Mini:
Me parece un coche al que le faltan dos cosas para ser la guinda de coche deportivo de tracción delantera: un buen cambio manual, y un eje posterior más vivo.
Las dos características le servirían para ser aún más exigente, y aunque no me parece un coche “redondo”, a mi me gusta; al menos en asfalto muy bueno.
Pero es que no se si es por la batalla tan grande y el tarado tan duro de suspensión que lleva, es difícil descolocar nada. Y dado que ya es un coche muy exigente con su conductor y por ello no servirle a cualquiera, podrían haber redondeado la jugada y haberlo pensado exclusivamente para la diversión en todos los detalles. Una jaula y una pegatina de “motorsport is dangerous” y a funcionar.
delarosa
24 de septiembre de 2020 a las 10:50@Patabrava
Estás describiendo el MINI GP R56, uno de los coches que más me ha gustado nunca. Precisamente, esa comparación mental hacía que no pudiera darle una gran nota a este nuevo MINI GP.
Bebé a bordo
24 de septiembre de 2020 a las 21:31Acabar de ver este pedazo de M2 y leer a continuación, «Fíat Multipla, el nacimiento de un mito» pues se me ha hecho raro, casi fuera de lugar; si bien cualquier cosa con ruedas y motor llamará mi atención y hará que lea el artículo con detalle.
indeciso
25 de septiembre de 2020 a las 08:43Gran artículo.
Del tema dinámico no puedo aportar ya que no he podido probar estas últimas evoluciones de ambos coches.
Sobre el tema de cuál elegir, creo que lo clavas absolutamente en el artículo. El cambio manual decanta la balanza clarísimamente por el BMW (el trasera) ya que, estéticamente, aunque sean muy llamativos, me gustan ambos. Si tuviésemos en cuenta precios, entonces (tal y como indicas), el Cayman. Se me hace cuesta arriba 100.000 € por un serie 2 con más extras que una de chinos.
P.D: Se echan de menos las fotos de FCarvajal…
Roberto Merino
25 de septiembre de 2020 a las 09:58Interesante entrada que espero podáis ampliar en el futuro con más detalle.
He estado husmeando en las páginas web de los respectivos fabricantes y tengo que decir que el MINI no me lo compraría ni loco. Su precio base es de 46000 € (!!!) dinero con lo que en el mercado de segunda mano puedes encontrar auténticos misiles mucho más disfrutables que un tracción delantera automático…si hablamos de coches nuevos, tampoco me vale la excusa de que en MINI han pensado que con un cambio manual sería un coche demasiado difícil de conducir, pues el mercado está lleno de GTIs tracción delantera de 280-320 cv, manuales y buenos, y nadie se queja de ellos. Y encima cuestan bastante menos; vease uno de mis favoritos, el Hyundai i30 N Project C, que esta tarifado en 50.000 pero con 6.000 € de descuento directo o el Civic Type R, que está en 45.000 €. Sin punto de comparación…
Respecto a la duda de M2 CS vs Cayman GT4, me he configurado 2 unidades tal cual yo me las compraría, el CS se me queda en 117.000 € mientras que el GT4 en 135.000 €. Al BMW le puedes poner los frenos carbocerámicos y poco más, mientras que el Porsche aún podría haberle metido 10 o 15 mil euros más en opciones que personalmente no veo necesarias. Dicho esto, la diferencia de precio es abultada y hará que muchos clientes se decanten por el CS, pero teniendo el dinero, la opción ganadora es claramente el GT4 bajo mi punto de vista. Creo que el GT4 es el rey indiscutible de los deportivos actuales, motor central, cambio manual, motor atmosférico, chasis GT de Porsche. Eso sí, estoy seguro de que en BMW harán buenas ofertas una vez en el concesionario para ajustar el precio un buen pico, algo que no creo que en Porsche hagan.
Deivid Torrepower
25 de septiembre de 2020 a las 12:04¿Pero es que nadie va a comentar lo flipantes que son los ensanches para los pasos de rueda del Mini?!? Sólo por eso ya me gastaba el dinero en el coche. Los delanteros tienen un aire a lo AUDI S1 del Gr. B que me pone frenético.
Para mi, los actuales cambios automáticos de convertidor de par BLOQUEABLE me parecen una opción tan maravillosa que no podría decir que no. Además a este le acompaña un autoblocante, que ya es el sumun. Por lo que quiero entender, corregidme si me equivoco, se desprende de vuestro artículo que el Mini es un coche todo en uno con personalidad de Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Lo mismo hace las funciones de utilitario en ciudad (por tamaño) que de gran turismo (viajes rápidos y relativamente cómodos por autovía) que de pseudo Kit Kar con el que te tienes que pelear en un tramo. Hasta dónde yo sé no hay ningún otro coche que abarque tanto y tan bien como lo hace el Mini. Y lo hace con un componente de diseño muy chulo y diferenciador dentro de un mercado en dónde «todos los coches son iguales»
El M2 es el nuevo M3, como se viene diciendo repetidamente y no sin razón. Dicho esto ¿quién puede resistirse a uno alicatado hasta los dientes? desde luego es un gozo para los sentidos tanto conducirlo, como el hecho de saber que llevas llantacas, frenacos, techaco en carbono… a los que tenemos muñones en vez de manos no nos hará ir mas rápido, pero la satisfacción de tenerlo bien merece la pena (y el precio)
Por eso no sé yo hasta qué punto se mete en el terreno del GT4. Complicado equilibrio entre un M2 alicatado hasta los dientes vs un Porsche, que será mucho Porsche, pero pelado como el culo de un babuino. Amén de que, para dejártelo guapo, súmale 1/4 de su precio en extras (ojo, algo que veo completamente normal una vez metidos en esta órbita de coches)
Para con respecto al vil metal que piden a cambio, el Mini no me parece mal con respecto a la competencia, teniendo en cuenta que puede hacer mas y mejor que el resto. El M2 creo que tiene un precio tirando a contenido (dentro de que es un pastizal) aunque este ya es un coche para usar los findes y en track days.
Saludos!
PanchoSalas
25 de septiembre de 2020 a las 15:06Genial artículo. Es el primero que me animo a comentar.
¿que cuál me compraría? si tuviera el dinero suficiente, claramente me compro el M2 CS. Dejando de lado los precios, me parece que el Mini es un poco más de lo mismo, encima automático. El mercado actual está repleto de autos tracción delantera, automáticos y al menos a mi me resulta contraproducente ponerle tanta potencia a un auto de esa naturaleza, cuando al acelerar toda la masa se va al tren trasero.
A mi modo de sentir, siempre nos vendrá bien ir al volante un tracción trasera, que claramente sacará muchas más sonrisas.
Si es por disfrutar del día a día, mi pensamiento está ocupado de forma eterna por el MX-5 ND2. El M2 CS se me antoja peligroso para rodar por cualquier calle jaja.. pisar un poco el acelerador y muy contadas veces llegar a la línea roja.
Saludos!!!
ToniExup
25 de septiembre de 2020 a las 16:10Buenas tardes.
¿46 mil pavos precio base por el Mini? Esto se nos ha ido completamente de las manos, por 50 mil pavos hay una larga lista de avionacos de segunda mano donde elegir. Aunque pudiera comprarme el Min, no lo haría.
El M2 no es que sea barato, pero al menos se nota algo más dónde te has gastado tu dinero
PATABRAVA
25 de septiembre de 2020 a las 18:31Respecto a los pobres (como yo) que miran el precio de los coches y encima tienen la osadía de meter segundas manos en la fórmula: si nos atenemos a la oferta frente a la demanda, el Mini ha sido (puesto que ya están todas las unidades más que adjudicadas) un auténtico éxito, así que consecuentemente es (era) BARATO.
Es más, el uso del coche que probablemente haríamos los lectores de 8000v será probablemente el que hagan un porcentaje ínfimo de sus compradores. Así que no se puede comprar con un typeR o con un M2 CS de segunda mano, porque sus compradores ni se lo han planteado.
Al final, todos los coches que se venden, se venden. Así que no hay que buscar tanta lógica al mercado, siempre hay un roto para un descosido.
¿Y yo?¿me lo compraría? Ni de coña, existiendo un M2 de segunda mano…Jojojojojo!!
Andy_Cupra
7 de octubre de 2020 a las 13:00Aquí en Mallorca (en Manacor) tuve la oportunidad de ver en directo un Mini GP y me quedé boquiabierto, todo él rebosaba mucho poderío, la planta que tenía, impresionaba, menuda pasada sería conducirlo. Por supuesto, me quedaría con el majestuoso BMW M2 CS sin dudarlo, ver uno en vivo ha de ser igualmente increíble. El M2 «normalito» es precioso ya.-
PRUEBA MINI GP 3: NO PARA TODO EL MUNDO – 8000vueltas.com
17 de junio de 2021 a las 16:54[…] Ya había leído acerca del MINI y de estas reacciones de la dirección en la prueba de contacto que mi compañero Delarosa hizo del coche hace unos meses, pero no me lo esperaba tan […]