Y no lo digo yo. Lo dicen vuestros ojos ¿nos engaña la vista? ¿O nos engañan las cifras? Los coches están cambiando, mucho, y sólo hay una manera de disimular lo evidente: caballos.
Sin embargo un deportivo nunca volverá a ser lo que era.
¿Se acabaron los buenos coches en 1999? Empiezo a pensar que sí…
¿Acaso un buen coche debe pesar más de 1.500 kg? Me hago la pregunta al revés, ¿debería un buen coche superar los 1.500 kg? Para responder a esta pregunta tendríamos que definir qué significa «buen coche».
El buen coche tiene muchos significados populares: es caro, corre mucho, caben muchas cosas dentro, viene muy equipado, etc, etc, etc. Si has asentido con la cabeza más de 2 veces mientras leías este párrafo, por favor, deja de leer. En Más que coches te contarán todo lo que necesitas saber sobre tu futuro coche.
Está claro que un buen coche puede ser, y desgraciadamente suele ser, caro. Un buen coche, a veces, es rápido. Si buscas algo práctico, que le quepan muchas cosas dentro es bueno. Y, para los mismos clientes, más es más.
Pero, a veces, menos es más. Indudablemente los coches de 1999 hasta la actualidad han mejorado mucho en aspectos como: ergonomía, consumo, comodidad, prestaciones… pero, por lo general, estas mejoras se quedan en el uso diario de los coches. Pocas veces encontramos placer de conducción cuando intentamos exigir un poco a nuestros coches.
Su razón tendrán en las marcas para actuar así: cada vez es más difícil «correr». Es más, no sólo es más difícil, sino que está de moda criminalizar cualquier uso del automóvil más allá de transportarse o como escaparate del, muchas veces no proporcionado, poder adquisitivo. Los argumentos con los que nos venden los coches en la actualidad siguen siendo los mismos: status, deportividad, confort… y, además, ecología, ¡qué vergüenza! Para ser ecológico utilice ud. el transporte público.
Pero no es el único abuso del lenguaje: deportividad. Hace falta tener bemoles para vender deportividad en 2010. ¿alguien recuerda lo que era un deportivo? Pues, que sepan, que ya casi no se venden. Ni un Clio Sport, ni un Focus RS, ni un Audi RS 4 son deportivos. Son derivados potentes y efectivos de utilitarios, compactos y berlinas masificadas. Son buenos coches, rápidos y potentes. De hecho son de las mejores opciones del mercado actual, pero algo se ha perdido por el camino. Un deportivo es ligero, con un tacto de conducción que honre su nombre, provoca sensaciones placenteras al volante y permite circular con agilidad por las carreteras donde la curvas mandan sobre los tramos rectos.
Puede parecer lo menos importante, pero la ligereza lo es todo: no sólo permite acelerar más rápido (eso lo pueden compensar muchos caballos), también permite frenar más tarde, cambiar de apoyo más ágilmente, necesitar menos potencia para disfrutar. Estos valores, que en un coche deportivo adquieren total protagonismo, son deseables en cualquier coche moderno. La conducción que entusiasma es más segura que la conducción aburrida, anodina, repetitiva.
Y también es más seguro viajar en un coche ligero: en el coche pesado se alargan las frenadas y la energía con la que nos desplazamos es mayor a igualdad de velocidad. Habrá quien diga que en caso de un choque con otro automóvil de mayor masa estaremos en desventaja. Pero si todos los coches aumentan su peso la desventaja es para todos. El beneficio individual perjudica al grupo.
Ya no son los SUVs, los monovolúmenes, los Hummers (que están fuera de toda categoría clasificable)… son todos los coches: desde los superventas hasta los deportivos más exclusivos. Todos crecen, todos engordan y nosotros no lo percibimos porque cada vez están mejor hechos, mejores acabados (afortunadamente, mucho más seguros), más y mejor insonorizados, más potencia… pero, ¿dónde está la emoción? Se quedó en 1.999.
Pero, ¿qué pasó con nuestros coches? ¿Cómo en 10 años ha cambiado tanto el panorama del automóvil? La electrónica puede darnos algunas respuestas. Los coches de los 90 hacían sus primeros experimentos con la electrónica: primeros controles de tracción y estabilidad, proliferación de cambios automáticos/secuenciales pero no era, ni mucho menos, la tónica general. Lo normal es que los coches deportivos fueran, básicamente, a pelo. El único control de tracción disponible era el pie derecho del conductor y para cambiar de marcha hacía falta mover la palanca con fuerza. Cuando nos subimos en la actualidad en uno de estos coches las sensaciones se repiten: todo está duro, de manera poco ergonómica y no parece que sea muy efectivo.
Da la sensación de que ir rápido con uno de estos coches es más un acto de fé que otra cosa. Sin embargo, es cuestión de adaptación. Con el tiempo, de tu destreza dependerá que sea más o menos, te vas sintiendo cómodo con el coche y progresarás yendo más rápido que en la curva anterior. Cuando se acelera a fondo, se frena con fuerza y se cambia de marcha con energía todo parece estar en su sitio. Los pedales en los que antes no podías encontrar la posición adecuada de conducción ahora parecen estar en el sitio adecuado y el punta-tacón sale solo.
Porque en estos coches hace falta hacerlo, no lo hacen solos y no es una floritura para pasárselo bien. Si reduces rápido y bloqueas con el coche un poco apoyado te puedes llevar un buen susto. Si te entra canguelo y levantas el pie del acelerador también te avisa: ¡lo estás haciendo mal!. Los deberes hay que llevarlos hechos a cada curva: se frena antes y se pasa la curva acelerando. Si no lo haces así no vas a poder ir rápido. Y estos coches no llevan filtros, no disimulan tus errores. Eso sí, se pagan caros, por lo que más te vale molestarte en aprender un poco y saber lo que haces.
Pero, ¿Cuál es el problema de que, teniendo todo esto, contemos con la ayuda de la electrónica? Ninguno. El problema no es el uso, sino el abuso y la dependencia que se está haciendo de la misma. Los deportivos se aburguesan hasta el punto de que se podría utilizar hasta un Lamborghini Gallardo o un Ferrari California para todos los días. Un Nissan GT-R no sería más que un barco no demasiado rápido si no dispusiera de sus fantásticos diferenciales activos. Eso no quita que no sean efectivos, que lo son, y mucho más que cualquier coche de hace 15 años. El problema es que un deportivo no tiene por qué ser efectivo. Un deportivo debe provocar disfrute. La efectividad, el bajar los tiempos por vuelta, sólo es necesario para coches de carreras o para la clientela que se mete en un circuito a tratar de arañar décima tras décima.
Para los demás, lo que solamente queremos meternos algún día en circuito, lo que queremos un deportivo para pasear a ritmo vivo, disfrutar, sentir el coche… para ese otro sector de la población no nos queda nada ¿somos tan pocos? ¿no hay negocio en este tipo de cliente? La verdad es que no lo sé, pero me remito a lo que veo. Mis amigos, conocidos y demás compañeros que me encuentro en un track-day o con los que salgo a disfrutar un tramo de montaña suspiran por un Porsche 964 o un 993, un Ferrari 355 o un 308 GTB, un BMW E30, un Sierra Cosworth, un NSX, un alfa romeo GTV6. Todos tienen algo en común. Quizá roza la blasfemia decir que es alma lo que tienen, pero cuando estás sólo en tu garaje y arrancas el coche entenderás a qué me refiero.
Fotos extraidas de Forocoches.
Extra Lap
nachetetm
7 de noviembre de 2010 a las 20:15Siento discrepar, pero creo que esta afirmación es demasiado categórica. Cada época tiene sus coches, y aunque los puristas se quejen, los coches actuales son mejores que sus predecesores. Cierto que un GT-R no sería nada sin sus diferenciales, ¡pero es que los tiene!, y eso es lo que le hace tremendamente efectivo y pesado. El mérito radica en hacerle parecer más ligero al volante de lo que dice la báscula.
Además, también hay coches por debajo de los 1500kg. Sin ir más lejos, un 458 Italia. Cierto que la electrónica te hace parecer más piloto de lo que eres, pero es que sin ella, sólo cuatro elegidos serían capaz de llevarlo «por lo negro».
Está muy bien recordar los coches de los 80-90, entre otras cosas, porque son aquellos con los que crecimos los de nuestra generación. Por eso, los queremos, porque los deseábamos entonces. Las nuevas generaciones babearán en el futuro por un GT-R como nosotros lo hicimos por un NSX, y también escribirán que los coches de entonces no tienen alma, que los antiguos eran mejores.
Para el que no lo haya leído todavía:
http://blogs.que.es/solo-pensamientos/2010/9/18/-tiempos-pasados-fueron-mejores-
En mi caso, y por mucho que me guste, por ejemplo, un Porsche 911 Speedster del 89, lo tendría en el garaje junto con un Boxster Spyder. Más que nada porque mientras el primero tiene más carácter, se que al final acabaría sacando más veces de paseo al segundo.
Pena
7 de noviembre de 2010 a las 20:45A mi lo que mas me asusta son los coches hibridos… les tengo un pánico enorme, creo que ese si que será el fin de los coches.
Asturias
7 de noviembre de 2010 a las 21:51La gente se ríe de mi porque uso un Fiesta L mkI como el de la foto. 0,957cc, 45cv (que ya se quedarán en algo menos por los años, a pesar del carburador Weber), 4 marchas, 350.000km y 32 años.
Sí, es cierto, no puedo pasar de 80km/h. Sí, si me la pego a 50km/h me mato. Sí, el día menos pensado me deja tirado (aunque en 32 años NUNCA ha fallado, y si lo hace lo repara un tonto). Sí, dedico mas horas para hacerle los reglajes de válvulas que a lavar el coche «bueno». Sí, no se lo puedo dejar a nadie porque se le cala mil veces (a mi nunca)…
Pero ningún otro coche me ha enseñado a conducir tanto como él. Con solo 45cv es mas difícil de conducir que muchos coches modernos. Tienes que saber frenar, saber acelerar, saber usar los 3 pedales a la vez, hacer doble embrague en la mayoría de cambios (los sincros de 1ª y 2ª están muriendo). Puedes jugar a descolocarlo sin tener que ir como un loco…
Y sí, la gente se ríe de mi, pero esa pelotilla me divierte, así que ya pueden reírse a gusto.
xosema
7 de noviembre de 2010 a las 22:15Mi Clio Sport 197cv me hace disfrutar, no pido más, es un buen coche.
Me encanta leer este blog,seguid así!
SR20de
7 de noviembre de 2010 a las 23:02echo de menos mi primera 2.0 de los 90…
ni abs ni controles, si frenabas de más bloqueabas y perdías la direccion. pero era una gozada
muy buen post!
Talieri
7 de noviembre de 2010 a las 23:24Por eso a mí me gusta tanto el Caterham Super7
Rusales
7 de noviembre de 2010 a las 23:41Totalmente deacuerdo. Un articulo digno de enmarcar. Enhorabuena.
mfga
8 de noviembre de 2010 a las 00:27El dia que conduzca al límite mi coche quizá piense en hacerme con alguno mas potente. De momento no lo he encontrado, y si bien es cierto que solo he hecho con él quatro vueltas en un circuito me divierto con él una o dos veces al més los fines de semana.
Me explicaré. Por suerte he podido conducir dos coches de mas de 300 caballos. Un Nissan 350z y un Bmw m3 e46, además de múltiples berlinas y compactos tanto gasolina como diesel, y ninguno me ha entusiasmado. Los dos me sorprendieron por aceleración, me sacaron la sonrisa ciega de un niño «feliz» por tener en las manos lo que queria, pero no me han permitido ir tan rapido como son capaces de ir por las carreteras por donde los llevé. El motivo es claro, són demasiado rapidos para no superar con creces qualquier límite legal de conducción.
Uno y otro són rapidos y efectivos, pero los encontré algo olgazanes en curvas enlazadas. Y no quisiera menospreciar lo que són capaces de hacer en un circuito o en un tramo de rally de asfalto bien cerrado al trafico, pero (quiza se rian) me lo paso mejor cambiando de marchas a 6000 vueltas con un Volvo 460turbo del 91. Probablemente porque pesa 1050kg, o porque puedo exprimir casi a tope sus 130cv, pero me dice exactamente lo que le ocurre en cada momento y lo único que le he añadido són unos neumaticos y unas suspensiones olhins que le compré a un tipo de aspecto «dudoso» bien nuevecitas.
Andy_Cupra
8 de noviembre de 2010 a las 03:39Estoy totalmente de acuerdo con usted Sr. Delarosa. Me encantan los artículos de 8000 vueltas -dicho sea de paso- y aunque breves (en cuanto a la cantidad de ellos, no a su extensión que es fantástica), son buenísimos. Como decía, totalmente de acuerdo con usted, en todo. El paradigma o el coche-súper-deportivo de éste fantástico articulo que podría definirlo con mayúsculas sería -por ejemplo- el FERRARI F-40. 1.100 kilos de auténticas y brutales sensaciones súper deportivas -sin ayudas electrónicas de ningún tipo-, con un peso ridículo para la potencia bestial de un bi-turbo como los que ya no quedan. Para una icono de los 80-90 que desgraciadamente no creemos que pueda volver a «verse» que representa un fiel reflejo de tan sencillo e impepinable artículo. Una pena pero… las circunstancias actuales «obligan». Un saludo para todos.
Josechu
8 de noviembre de 2010 a las 11:25Por esto mismo me encantan los Lotus!! Aunque por lo que he leido, van a perder su ligereza en favor de la poencia. Creo que llevais razon, los deportivos están muriendo.
kikorro
8 de noviembre de 2010 a las 11:36wow me ha encantado el articulo, coicido lenamente con el y mas que nunca las imagenes hablan por si solas….. la primera con los ferraris es para llorar… y gente que lleva coches de casi dos toneladas y se cree que es un deportivo….
La unica pega que le veo al articulo es el titulo que puede llevar a confusion como a @nachetetm ya que realmente no es el fin de los coches (por que no van a parar de fabricar monovolumenes cada vez mas grandes para todos) pero si es el fin de los deportivos de raza.
Biako
8 de noviembre de 2010 a las 12:00Yo estoy en desacuerdo con el artículo porque aparte de ser una afirmación demasiado categórica como bien dijo nachetetm, es bastante sensacionalista que parece que lo único que busca es aumentar las visitas. En mi opinion todo el artículo podría resumirse en : comprate un track day car.
Se que queda decir bien que un coche debe pesar poco, que las ayudas electrónicas sobran y que para ser ecológico use el transporte público. Estimado delarosa, si la industria del automóvil ha evolucionado así no es por propio capricho de los fabricantes, si no por beneficio y seguridad de los conductores y de la sociedad en general. Estoy de acuerdo en que en general los coches actuales son más aburguesados que los de otras épocas, imponiendo muchas restricciones al conductor y desconectándolo casi totalmente de la carretera, pasando a ser un mero muñeco que únicamente tinene que mover el volante (los pedales ya casi no hacen falta). Sí, en eso le doy la razón, pero solo en el caso de que estemos hablando de coches dirigidos al gran público y destinados a andar por autopista o por ciudad, porque seamos sinceros, el público en general no desea un coche con el que ir rápido por las curvas o que acelere de 0 a 100 en menos de 4 segundos, lo que busca es un mero transporte que sea seguro fiable y cómodo,que es directamente proporcional a un aumento de peso. Si me habla usted de deportivos, no me hable usted de Audi RS4 o Clio Sport, hableme de Porsche GT2 RS, Ferrari FXX,M3 GTS o para un bolsillo normal un boxter spyder, porque si me dice por ejemplo que el Porsche GT2 RS no transmite sensaciones apaga y vamonos…
Claro que existen deportivos y marcas que han cambiado su filosofía, como por ejemplo Ferrari, que ya no busca exlusivamente deportividad, pero también hay que darse cuenta de que esas marcas a mi parecer no están destinadas a un público el cual desea meter su coche por circuito a menudo, si no a alguien que quiere ir rapido momentaneamente con un diseño excelente y una comodidad bastante elevada (de ahi el alto peso), o simplemente a aquellos que quieren demostrar al mundo su alto poder adquisitivo. Pero también existen otras como Porsche que siguen fieles a sus principios e intentan que el conductor disfrute al volante.
En lo referente a ayudas electrónicas, es correcto que hacen parecer mejor piloto de lo que es y en muchos casos frenan más de lo que ayudan… pero hay que tener en cuenta de que si te compras un coche rápido que disponga de las mismas, en la gran mayoría existen controles para desactivarlas, como por ejemplo el famoso manettino, por poner un ejemplo conocido.Eso sí,quiero ver quien es el hombre que desconecte las ayudas en un deportivo en un circuito complicado con barreras pegadas a la pista…
«Para ser ecológico utilice ud. el transporte público», si tuvieramos una solucion para la emisión de gases y el mundo fuese del color rosa pues sí estaría de acuerdo en esa afirmación, pues yo tambien estoy quemado por el downgsizing monstruoso que le hacen a los automóviles actuales, pero para beneficio de la sociedad en conjunto, las emisiones de CO2 deben ser disminuidas, no solo por el presente inmediato si no por el futuro en general del planeta, no se si usted vive en una gran ciudad pero el conocido efecto Smog es ya preocupante, y no hablemos ya de casos extremos como Hong Kong, pasando por lluvia ácida… Todo el mundo podría tomar la cómoda postura de «pues coja el bus», pero hacer ese razonamiento me parece demagógico ya que si cada uno de nosotros hiciesemos lo que más nos conviene viendo solo por nuestros propios intereses aun estaríamos intentando encender fuego…
Estimado delarosa si usted quiere ir rápido cómprese un track day car como un Lotus Exige Cup 260 o un KTM Crossbow,coches ya destinados a ir rápido por circuito y nada pensados para ciudad, pero no diga que es el fin de los coches, porque eso me parece ya generalizar demasiado y criticar a coches los cuales lo único que hacen es lo que estan diseñados a hacer…
Alberto E.
8 de noviembre de 2010 a las 12:01Me apunto al carro de nachetetm. Creo que el «media», con sus campañas de marketing emulando los 70 para todo, y la memoria de la infancia, os están jugando una mala pasada.
Es cierto que el peso es el «enemigo a batir» actualmente, pero no desde 1999, sino desde bastante antes -1990, diría yo-. Es más, en la última decada, muchos han reaccionado, proponiendo alternativas.
Pero es que, antaño, existían otros dos enemigos muchísimo peores:
1.-La fiabilidad: casi todos esos coches de los 70 de las fotos de éste y otros artículos eran una auténtica «castaña». Y no sólo comparados con los de ahora, no; comparados con un coche «normal» de su tiempo.
2.-El precio: Por no ir tan atrás en el tiempo, sólo diré que el GTR «pequeño» (y super-pesado para su época, por cierto) era el doble de caro que el actual, en términos reales. Y un NSX como el de la foto, más del triple que el GTR. Y el R-5 Turbo…
Además, la década inmediatamente posterior al inicio de la crisis del petróleo (1973), fue la menos prolífica en la historia del automóvil. Hay excepciones, pero no se hizo más que «marear la perdiz» hasta que apareció el Audi Quattro.
Conclusión: es estupendo «soltar una lágrima» cuando se ven coches increíbles de otras épocas. Pero, si te pasas el día lloriqueando, te puedes perder la tuya.
Tocino
8 de noviembre de 2010 a las 12:04Amén… 5 estrellas.
Anyway, coincido con un compañero de más arriba… ohh amigos, temblad porque el fin real es inminente, los coches que tuvimos de pequeños se apoderarán de las calles; pero hablo de los… eléctricos!!! Si, pánico me da a mi también un método tan insulso como un funicular.
Pero tampoco os martiriceis… Creo que nos son comparables y que los coches actuales pueden ser disfrutados… de otra forma. La seguridad que tienen, eficiencia, acabados… Mientras podamos conjugar su uso con un youngtimer todos contentos, no?
JUANCHO DE PARQUE DEL PLATA URUGUAY
8 de noviembre de 2010 a las 12:31Soy un amante de los coches y veo que actualmente es tanto lo moderno que existe en los autos que se ha perdido hasta el sonido de los motores.- Y de acuerdo a lo que se ve en las exposiciones se vienen con una aceleracion los electricos.- Con esto espero que el combustible baje de precio y sea mas accesible, ya que tendremos que usarlo por unos años mas.- Pero volviendo al asunto, que lindo era sentir un V8 – V6 – o un 5 cilindros.- Dispongo de un Ford y un Fiat, pero tengo el juguete de un Audi 100 cuando quiero sentir debajo de mi un verdadero auto, que a pesar de los años , hoy todavia me divierto junto a muchos nuevos.- Aquellos que quieran sentir un auto tienen que bajarse a la decado del 60/80.-
James Hunt
8 de noviembre de 2010 a las 14:35«Quizá roza la blasfemia decir que es alma lo que tienen, pero cuando estás sólo en tu garaje y arrancas el coche entenderás a qué me refiero.»
Dudo que el comun de los mortales te comprendan, tan solo unos fanaticos idealistas de la conduccion pura, de los tres pedales y del disfrute mediante la superacion personal en coches sin filtros y dificiles te podrá comprender…
Creeme, llevo pensando como vosostros mucho tiempo, ninguno de mis amigos y alguno de ellos «aficionado» a los coches me ha entendido jamas, somos raros, diferentes, entusiastas y fanaticos de algo que solo se puede justificar sintiendo devocion por lo obsoleto y desfasado como es ir a pelo, sin preocupaciones ante el crono, ni por potencia, sino solo contenmplando la conduccion y su disfrute como el sentido final a la adquisicion de un sueño.
PD: es como un 911, no tiene sentido tener el motor trasero, pero ese sin sentido es lo que lo convierte en algo especial, con un comportamiento exigente y unico, requeriendo por parte del piloto buenas dotes para ser conducido como el se merece y eso, Porsche, como tantas otras, lo esta perdiendo, ahora hay que vender coches a quien pueda pagarlos, no a quien los ame.
PD2: pienso que hay dos coches, que surgieron tras el 99 y aun conservan esa esencia, S2000 y Z4 M Coupe.
Ángel Martín
8 de noviembre de 2010 a las 14:54Fantástico post, me siento tan identificado que se me han puesto los pelos de punta. Tengo un Toyota Corolla GT (AE86) y hoy en día no hay ni un solo coche que le haga sombra a nivel de sensaciones. Los hay más seguros, los hay más rápidos (aunque no muchos en su segmento), los hay mejor acabados, pero no es lo mismo. Cuando sientes la carretera a ese nivel, cuando oyes el sonido del motor subiendo hasta casi 8000 vueltas, y sobretodo cuando redondeas una curva; se te queda en la cara lo que cualquiera llamaría una sonrisa de gilipollas. Pero si de eso se trata, seré gilipollas toda mi vida. Amo a los auténticos deportivos y los amaré siempre.
Endi
8 de noviembre de 2010 a las 14:55yo hecho mucho de menos mi fiesta XR2I pesaba 900kg tenia un motor 1.6 de 8v y kon 110cv ese coche si k me enseño a conducir aprender a sacar el maximo partido a lo frenos sin llegar al bloqueo sacar el maximo partido al motor era increible como deboraba las carreteras de montaña increibe ahora tengo un focus nuevo y no me da ni la mitad de sensaciones k el fiesta en mi opinion los coches han perdido mucho
PIÑA
8 de noviembre de 2010 a las 15:03Es indudable que los coches de hoy en dia son más efectivos en TODOS los aspectos…ahora bien…¿deportividad? Todo depende de lo qeu entiendas por este concepto. La RAE lo definde de la siguiente manera:
«automóvil deportivo: generalmente de pequeño tamaño y de dos plazas, diseñado para que alcance grandes velocidades y sea fácil de maniobrar.»
Según eso, y teniendo claro que un deportivo no es un coche de carreras, y aparte, a la definición, le añado: y que aporte sensaciones de conducción y requiera destreza al volante.
Y para mi no, un Veyron no es un deportivo, ni un Clio Sport, ni un Focus RS…son coches RAPIDISIMOS, super efectivos, pero no puedo denominar deportivo a algo que, como te pases, te lo soluciona solo.
Un deportivo tiene que ser un coche por supuesto ligero y pequeño, no necesariamente potente, que lo de todo arriba, con cambio manual y sus tres pedales, que no permita errores, que conducirlo por lluvia requiera siempre estar pendiente, qeu sea incómodo, que te haga pelear con el volante…QUE TE DIVIERTA.
Hablando de compactos deportivos, estoy seguro qeu un Clio Sport actual es más rápido que un R5 Turbo, o un Focus RS más rápido y efectivo que un Escort Cosworth… pero considero más deportivos (sin serlo) los antiguos…cosas de la vida.
¿Lo ideal? El coche viejo en el garage y el coche moderno para ir a trabajar.
Chemita
8 de noviembre de 2010 a las 15:37No podriais haberlo explicado mejor…
Los buenos coches son los que se hacen durar, los de ahora estan pensado para que duren como mucho… 6 años. Cualquier modelo antiguo es mucho mas duro que uno de estos «plasticosos» ya sean deportivos o no, que les falla la electronica y tienes que tirar de grua, con los antiguos no pasaba, siempre puedes echar mano de la ñapa y seguir el camino, disfrutas el doble eso si… la seguridad ganan los modernos.
Por ahora todos los coches que tengo son mas viejos que yo, y nadie entiende el porque, los ve como coches viejos, ahora si no tienes un BMW no eres nadie, ya puedes vivir en una chavola que tu estatus social lo marca tu Mercedes…
Sir Andrew Vickerman
8 de noviembre de 2010 a las 16:27Sí pero no… Supongo que copiaré esta respuesta en el club en cuyo foro ambos participamos (sigo sin saber si es usted socio ya o no), pero sé que le gustará verla por aquí.
Digo sí pero no, porque los coches modernos son mejores que los coches antiguos, de la misma forma que los coches caros son mejores que los coches baratos. Sé que esta frase jode, pero la digo. Y si jode es porque vemos las cosas con ojos de pobre. La realidad es que un Mercedes S500 es mejor que un Hyundai Grandeur-Superclass (si es que existe), y no porque sea más caro, sino porque es mejor.
Comparando «apple to apple», como me piden a mí las comparaciones los de la central de Bangkok, las cosas son así por puras cuestiones técnicas que, extendidas, se pueden asimilar a cuestiones lógicas. Hay quien dice que sólo el Porsche 911 RS del 76 es el auténtico, o el 930 Turbo, que los nuevos tal y cual… tonterías, un GT3 RS actual es mejor que todos ellos juntos. Y lo mismo sucede con los Ferrari 246 GT, 308, 328, 348, 355, 360, 430… un 458 es sencillamente mejor, por ser más rápido, más fiable, más cómodo, más usable, más estable, frenar mejor, girar mejor, o sencillamente por el hecho de arrancar, cosa que hasta la llegada del 430 no siempre estaba garantizada. Que TODOS prefiramos tener un 246 GT, a ser posible blanco, por ser (si se me permite la cosa) la esencia del actual Lotus Elise, es un tema bien distinto, y no quita para que, como digo, por pura cuestión lógica, un 458 (que no he tenido el gusto de ver aún, por cierto, a ver si vuelvo a la civilización y me dejan tocar alguno) sea lo que es: mejor.
Y eso no sólo pasa en los deportivos, sino en todos los coches. Sucede que las cosas se han ido separando y cada segmento ha tomado su camino, pero nadie, absolutamente nadie, puede negar que un BMW 320d actual es considerablemente mejor producto que un BMW 320i E30 del 86, si tenemos en cuenta para qué se hace y se hizo. Lo que me lleva a otra reflexión, por la que quizá su artículo debería de haber tirado, y es que antes los coches se hacían para durar, y ahora se hacen para usar y tirar. Pero ese es otro tema y en absoluto se puede aplicar a los deportivos, que es de lo que usted habla. Porque, ciertamente, los deportivos viejunos eran malos hasta decir basta…
He tenido la suerte de ver muchos coches con los que la gente sueña, incluso conducir algunos de ellos. Los coches no se terminaron en 1989, ni en 1999, ni en 2009, ni se terminarán. Cambiarán los criterios, y será cuestión de adaptarse. Echo de menos mi Fiat X 1/9 del 81, su carburador y sus cuatro salidas de escape, pero qué coño, un día volviendo a casa en mi Mazda MX5 (por cierto, de 2002 y totalmente arcaico) detrás de un Clio modernísimo, ví las luces direccionales del Renault y quedé maravillado.
El tema es la adaptación y buscar el compromiso ideal. ¿Qué pasa? Que el compromiso ideal es carísimo, ese es el único y verdadero problema.
rubbenk
8 de noviembre de 2010 a las 18:47no puedo estar mas de acuerdo con el post. se está perdiendo la deportividad y se están «inflando» los coches en tamaño exageradamente. Impresiona la comparativa de tamaño en la primera foto entre el 599 y el 355 (creo que son esos) , o entre el nissan gtr y el honda nsx. Que tendencia mas absurda!! Menos mal que aun quedan verdaderos aficionados a la deportividad, que preferimos un Mazda mx5 del 92 a un Focus tdci 120cv aunque el primero sea mas lento.
David GT
8 de noviembre de 2010 a las 19:02Sr. Delarosa, permiteme el poder tutearle, pero eres un romántico de cojones! me encantan estos post escritos desde el corazón, criterios razonados con el arte y la belleza, que no atienden a la propia razón.
El alma de esos coches a los que te refieres es lo que los hacen perdurar en el tiempo y esa es la razón en decir que los coches de hoy en día han perdido ese alma (con la electrónica…etc.), sea de otro modo el afirmar que menos serán los que perdurarán.
El tiempo ya ha consagrado a esos coches deportivos de los que nos referimos, creo que eso es una realidad.
David GT
8 de noviembre de 2010 a las 19:43Yo tengo un mx5 del 90 y me tiene enamorado, cada día lo disfruto mucho más.
Una cosilla para el sir Andrew, aquí mando esta dirección que seguro que os gustará saber, en referencia a las luces direccionales del modernisimo Renault.
http://www.youtube.com/watch?v=uF9oYC7HhUQ&feature=player_embedded
Luis Gaton
8 de noviembre de 2010 a las 20:01Hummmm, me encantan las fotos del artículo, son muy expresivas.
En cambio, no estoy de acuerdo con el título tan tajante del artículo.
Como ya han comentado por ahí arriba (para no repetir), cada coche tuvo su momento. Quizá fuera más emocionante conducir un coche de 250 CV, armado simplemente con los neumáticos que hoy llevaría un utilitario de 70 CV y unos frenos poco dosificables y con tendencia al bloqueo, pero hoy en día lo que se lleva es tener un coche forrado de asistencias electrónicas que te salvará de la galleta si te flipas más de la cuenta al volante, y en caso de que te la pegues, con una pesada estructura de acero bien estudiada que te salve la vida.
Y digo esto siendo defensor de los coches pequeños y ligeros (son los que más me gustan), pero no estoy de acuerdo con que ya no existan deportivos. Simplemente..son otros deportivos.
Por suerte, siempre quedará Lotus :-)
Saludos!
Xavih
8 de noviembre de 2010 a las 22:03Ahora se porque no encuentro aparcamiento en mi barrio, cada vez hacen los coches mas grandes y el espacio es el mismo….Bromas aparte coincido con el articulo 100%. He cambiado un coche gasolina con carburador, propulsión trasera a pelo y sin dirección asistida (Ford Sierra) por un diésel, tracción delantera, abs ,esp y dirección servoelectrica (Peugeot 207).
Aun recuerdo los buenos momentos que me hizo pasar mi anterior coche ciertos aspectos pero hoy por hoy no desharía el cambio por determinados conceptos como comodidad, seguridad, y sobre todo consumo. O sea de lunes a viernes optaría por los años actuales pero para el fin de semana ojala conservara un coche de los 90. Saludos
ramón roca maseda
8 de noviembre de 2010 a las 22:46Oscar, no puedo estsr en desacuerdo contigo, tú lo sabes.
Más aún, es muy triste saber que coches de éxito hoy – como un Mini, un Continental o un SLS, por citar solo algunos – sean actualizaciones de hitos ya descatalogados, que no olvidados o desvalorizados, lo que dice muy poco de la creatividad y mucho de la impotencia.
Pero la densidad de nuestro tráfico ha crecido exponencialmente, el automóvil se ha convertido en un útil demasiado utilitario y el estado no se conforma con ordeñarlo extrayendo impuestos de todo tipo a su costa y, lo que es peor, así como cundió aquello de «este país no se merece un gobierno que miente» también cuajó el sofisma de «la velocidad mata».
La consecuencia sólo puede ser una y la reacción igual, la respuesta de un ser inteligente( y con alma ): adaptarse, y adaptarse es lo que ha hecho nuestra principal fuente de riqueza, el automóvil.
Así pues, a nuevos tiempos, nuevos automóviles.
Entonces, ¿ son decepcionantes nuestros automóviles actuales o es decepcionante el tiempo en el que vivimos ?
Tratamiento: creer y esperar en nuestros amigos los automóviles y en los tiempos en los que vivimos y, si no nos gustan nuestros días y nuestros coches, en nuestras manos y mentes está cambiarlos, sin olvidar que una cosa es paralela de la otra ya que lo uno lleva a lo otro.
No lo olvideis: todos los coches van al cielo, aunque los tiempos se lo puedan poner dificil.
krolinx
8 de noviembre de 2010 a las 22:52Muy deacuerdo en casi todos los puntos,ahoramismos estamos absortos en el hype, el mercado mejora y se nos dilatan las pupilas al ver un nuevo teaserde estos por fasciculos, nisiquiera hace falta ver el coche entero o nos nublamos por el olor a nuevo; lo que habeis echo en este editorial es cerrar los ojos y ver las cosas de un modo mas visceral, sensaciones al volante, un toque de atencion en algo que se nos esta olvidando. Y con esto me refiero especialmente a esa conviccion de que todo lo que no parezca actual es una antigualla.
Luis
8 de noviembre de 2010 a las 22:52Estoy totalmente de acuerdo, incluso me iría más allá que ese 1999 que no sé por qué eliges, 1989 si quieres, pero no importa, la esencia es la misma.
Te dejo una frase que me dijo un dia un buen amigo y ahora suelo usar de firma en los foros, lo dice todo:
«Cada vez que aparece un coche nuevo en el mercado, desaparece con él parte de la esencia del automóvil que quedaba en su antecesor, y así progresivamente desde hace muchos años»
Jaime ehu
8 de noviembre de 2010 a las 23:39Yo ese amor por los deportivos lo comparo, si es que se me permite, con la manera de hacer ejercicio/deporte antes y ahora.
Hace años yo salia amenudo a correr por mi barrio con unos amigos y corriamos hasta el monte, subiamos por diferentes senderos y caminos de cabras, cuando llegabamos a una pequeña explanada alli haciamos flexiones, abdominales y diferentes ejercicios, y despues de eso de vuelta para casa. Al dia siguientes tenias unas agujetas de mil demonios pero tambien tenias una sonrisa en la cara… habias disfrutado
Hoy en dia en cambio vamos a un gimnasio a correr en una cinta que te marca velocidad, consumo de calorias, pulsaciones… y despues sigues con tu hoja de ejercicios y te toca hacer unos muy concretos, con todo muy estudiado, con movimientos controlados, 10 repeticiones de 15… etc etc, y claro, todo esto con tu iPod… sinembargo al dia siguiente no tienes esa sonrisa en la cara.
Hace 10 años tu hacias el ejercicio (corriendo monte arriba, o apurando la frenada al maximo) y hoy en dia las maquinas te hacen el ejercicio (subiendote a una cinta de correr o siendo salvado por el control de estabilidad)
Los tiempos cambian… y no siempre a mejor en el tema de los coches de disfrute…
Emilio
8 de noviembre de 2010 a las 23:47No puedo estar mas de acuerdo, la esencia de la conduccion pura la estamos perdiendo a pasos agigantados, los ordenadores hacen el trabajo por nosotros, y estamos perdiendo esa «artesania» conduciendo en pos de la supuesta seguridad, la comodidad y la apariencia. Respeto al que piense que los coches de hoy son mejores que los de antes, pero yo me quedo con mis Hondas de los años 90 ( tengo 2, ambos con mas 100cv/litro atmosfericos). Por encima de cualquier vulgaridad de coche moderno, super equipado, y lleno de sensores de todo. Tengo 26 años y lo he mamao desde pequeño, el dia que tenga una familia, viajara en una berlina superequipada diesel, con cambio automatico, y con los ultimos avances en seguridad. Pero hasta entonces, prefiero ser un artesano, aprender en cada curva, y practicar lo que mas me gusta, conducir de verdad, sin limitadores ni controles, usando las manos y la cabeza para tomar la mejor decision en cada momento. Eso es conducir.
jarnu
9 de noviembre de 2010 a las 04:41¡Ojalá fuera el fin de los coches! ¡Ojalá sólo queden románticos vehículos para un par de personas y las sensaciones que da moverse a través del viento, de la tierra, de la vida miserable! ¡Ojalá vivamos un mundo donde en las ciudades y pueblos, donde las personas que quieran estar o comunicar, puedan hacerlo rápida, económica y placenteramente! ¡Ojalá corte el sol con un cabrio y saboree la sonrisa de mi esposa acertando con la velocidad de entrada al vértice en esa curva complicada mientras atardece y marchamos a un convite de amigos!
Mientras, menos mal que ya admitimos que somos conductores de guaguas (como dicen en mi tierra). Menos mal que ya no disimulamos el malestar por el obligado tránsito. Menos mal que elegimos el blanco lavadora de color para el vehículo diario. Menos mal que nos dan electricidad en vez de gasoil si se tercia. Menos mal que ya no nos preocupamos tanto de mantenimientos o trucos arcanos de los modelos. Menos mal que ya el coche es como el teléfono o la nevera, que no vemos y sólo usamos. Menos mal porque nos han obligado a llenar nuestra vida y nuestro espacio con un trasto carísimo y muy poco fiable, sucio, ruidoso y peligroso, al que encomendamos cada mañana nuestra suerte y la de los nuestros.
Total, para qué jodernos más pensando en un trozo de plástico y metal. ¿Nos va a besar? ¿Nos va a querer?
Pues eso piensan los que nos venden los coches y además creen que piensan lo mismo quien los compran. El márquetin hace lo primero y la fábrica lo segundo.
La fecha del cambio da igual: Porsche quizá la entrada del watercooled, Alfa pues la desaparición de los trasera o del Busso, Lotus quizá la próxima y equipadísima generación, Ferrari tal vez con la muerte de Enzo, Bentley, Rolls, Toyota, Honda, Aston, Jaguar,… Seat, Audi, tantos y tantos que se podría decir que dejaron de ser ellos cuando fueron comprados o cambiaron su configuración estrella, cuando dejaron de lado su idiosincrasia y homogeneizaron todos sus productos para gustar a la mayor parte de población posible.
Y ganaron los alemanes. No la gran guerra quizá, pero sí ésta cosa que nos lleva por el camino de la amargura. Ganaron y los demás están sumándose, destilando eso que tanto nos gusta de ellos, para ponerlo en sus coches también.
Bienvenidos a los Panzerkampfwagen del siglo XXI. No queda otra cosa.
ArteCar24
9 de noviembre de 2010 a las 10:34Por eso nos apasionan los clásicos. Representan otra filosofía, otra manera de hacer las cosas. Hoy no podemos pedir a la industria automovilística que tenga en mente los mismos clichés que hace 20, 40 ó 60 años. Tampoco podemos mantener coches poco efectivos en nuestro parque automovilístico.
Debemos de pensar que el futuro está en el transporte no contaminante, en servicios públicos efectivos y, mejor aún, allí donde se pueda, en el teletrabajo, algo que ayudará a disminuir la necesidad de traslados, dado que «ir al trabajo» es la «gran causa» del uso del automóvil.
Y los fines de semana los dejamos para sacar nuestro viejo TR3, quitarle la capota si hace buen tiempo y a rular por carreteras de montaña.
Tom-miata
9 de noviembre de 2010 a las 14:22Creo que todo se traduce en: amamos la fisica de un automovil.
cuanto mas moderno mas se parece a un robot… y un robot sabe hacer muchas cosas por si mismo, y menos fisicas sentimos. interactuamos menos con el.
1) yo quiero para divertirme un coche con »volante, ruedas y pito» de esos con »alma» que te sacan una sonrisilla incluso una vez aparcado… te alejas de el, giras la cabeza, lo miras… y sonríes como un bobo, porque es como tu perro, tu socio. (o algo asi)
2) pero para viajar (viaje no divertido en su transcurso, o acompañado de gente la cual no es para que aguanten G’s laterales ni el sonido de tu motor con admision directa casi ensordecedor a todo gas) prefiero un coche moderno, seguro, potente,con un consumo reducido (pero gasolina! jeje), etc etc.
Como la gente normalmente quiere un coche para lo segundo, pues cada vez hay menos opciones en el mercado de un coche para lo primero. ¿no? yo lo veo así.
siempre podrás comprar un super7 o similares… pero mejor opcion es tirar de la segunda mano 70s, 80s..
una opinion mas! un saludo.
Angel Terrés
9 de noviembre de 2010 a las 14:36Oscar, enhorabuena, no tanto por el artículo -que desde luego también la merece- sino por la capacidad que tenéis de generar «polémica» o debate entre nosotros y, con ello, enriquecer el ya de por si excepcional trabajo que altruistamente realizáis.
Me da la sensación de que vamos a disfrutar mucho los siguientes artículos……
Antonio
9 de noviembre de 2010 a las 15:36Muy buen artículo. Las fotos que habéis puesto no hacen justicia a los coches actuales. No me des cv y quítame Kg…!!! No estáis locos diciendo lo del alma.
Un saludo grande.
Scuare
9 de noviembre de 2010 a las 17:45Leyendo algunos comentarios creo que no todo el mundo ha entendido bien el punto de vista del artículo… Soy joven (26) y no tengo la experiencia ni he tenido la oportunidad de conducir tantos coches como muchos de vosotros, pero comparto totalmente la opinión y sentimiento de Delarosa. No es que los coches de ahora sean malos, al contrario, son mejores. Pero son tan mejores que «aburren»… De los pocos coches que he podido probar me quedo con coches relativamente antiguos: Civic VTi ’92, CRX ’90, MX-5 ’91, mi coche actual un Impreza GT Turbo ’99, etc… son coches que a mi parecer, transmiten sensaciones que otros coches, mucho mejores, más rápidos y potentes no me han transmitido, como un M3 cabrio, un CLS 500, un Civic Type R FN2 o un Focus ST. Como ya digo no tengo mucha experiencia, pero creo que la era de las sensaciones puras se va terminando para dejar paso a la electrónica y la efectividad, que sin lugar a dudas es más segura para todos.
Alex
9 de noviembre de 2010 a las 19:22Yo creo que hasta dentro de 6 o 7 años no se verá un coche bueno como pasó cuando salieron los TDI, coches económicos y bastante rapidos, o los GTI de finales de los 80.
En esta década que terminamos, para mi la década de los acabados plasticosos como decís, la de las luces led, la de aprovechar stocks con inventos de coches como el peugeot 3008… no hay demasiados avances, coches más pesados, más prestaciones e incluso más consumo, salvo rara excepción.
Un escándalo era tener un dodge 3700 en los 70 y no es escándalo tener un cayenne….la cultura del pelotazo…ahora tendrán que reinventarse los fabricantes debido a la política…
Veremos a ver que pasa
Marcos
9 de noviembre de 2010 a las 22:12No estoy de acuerdo. La electronica, incluso para la gente a la que le guste conducir, ha conseguido democratizar las sensaciones, no las ha matado.
No serán tan altas y sublimes como cuando te la jugabas sin ayudas, pero están igual ahi. Tampoco están los tiempos para jugarsela (trabajo, familia, responsabilidades, etc).
Los pasos por curva ayudados por la electronica los puede hacer quien quiera más rapido y seguro que con aquellas maquinas espartanas. Lo mismo con la tracción, con la conducción en mojado, con las frenadas…. ¿sigo?
Reconozcamos que la mayoría no somos pilotos, y la carretera cada vez tiene más coches conducidos por gente muy poco habil y que no van a esforzarse ni lo más minimo en aprender a contravolantear, a hacer punta-tacon, a ahuecar una curva, a sentir el intercambio de pesos… Que los lleve rápido y seguro les basta.
Sin ir más lejos, un amigo mío con un coche de +500cv nunca jamás lo ha pasado de 150km/h ni en autopista. Y le digo ¿para que quieres entonces semejante establo? No supo decirme… ¿por que es bonito? ¿por que puedo pagarlo? ¿por que es seguro? No se le pasó por la cabeza un ¿por que es más rapido…?
Entonces la industria automovilística dá a los pocos que quieren sensaciones estos «deportivos de ahora» pesados, faciles de llevar, comodos, lujosos, seguros, caros pero suficientemente rapidos para sentir algunas «cosquillas» si los quieres llevar más allá.
Jose
10 de noviembre de 2010 a las 03:36Se dan nuevos tiempos y la industria se adapta a ellos, su producto toma la forma que esta sociedad capitalista demanda.
Es triste que la sociedad y su sistema económico vayan montados en este tren capitalista, es triste para sus amantes que el mundo de automóvil vaya en un vagón de dicho tren, y lo que es más triste es que se lleven tambien consigo este bloque del sector automovilístico que tanto nos gusta a los apasionados por los coches deportivos o coches racing.
En muchos aspectos, entiendo la evolución que el automóvil utilitario siga por ese camino pues así lo demanda esta soiedad transformada. Pero no concivo como nuestros amados coches deportivos pueden alejarse tanto de lo que su pequeño público demanda: Un coche diseñado para asemejarse en la mayor medida posible a un coche de carreras, tanto en prestaciones como en sensaciones (Personalmente, dando prioridad a lo segundo).
Es poco lo que podemos hacer frente a esto, a parte de buscar alternativas que nunca son lo mismo: Coches diseñados para track days, coches de los de antes restaurados o coches actuales preparados para que se acerquen a lo que demandamos.
Sería interminable hablar de fechas ni coches concretos. Pero sí me permitiré la licencia de invitarle a nuestro autor a conducir un focus RS, sobretodo el fabricado en los años 2003-04 más que el del 2009 (sin descartar a este), pues por sus afirmaciones sé que nunca jamás, hasta la hora de escribir este artículo, puso las manos a uno. Quizá le ayude a ver como algunos todavía apuestan por este público que busca dos cosas básicas en un coche deportivo: sensaciones y prestaciones.
Scuare
10 de noviembre de 2010 a las 10:56Leyendo algunos comentarios creo que no todo el mundo ha entendido bien el punto de vista del artículo… Soy joven (26) y no tengo la experiencia ni he tenido la oportunidad de conducir tantos coches como muchos de vosotros, pero comparto totalmente la opinión y sentimiento de Delarosa. No es que los coches de ahora sean malos, al contrario, son mejores. Pero son tan mejores que “aburren”… De los pocos coches que he podido probar me quedo con coches relativamente antiguos: Civic VTi ’92, CRX ’90, MX-5 ’91, mi coche actual un Impreza GT Turbo ’99, etc… son coches que a mi parecer, transmiten sensaciones que otros coches, mucho mejores, más rápidos y potentes no me han transmitido, como un M3 cabrio, un CLS 500, un Civic Type R FN2 o un Focus ST. Como ya digo no tengo mucha experiencia, pero creo que la era de las sensaciones puras se va terminando para dejar paso a la electrónica y la efectividad, que sin lugar a dudas es más segura para todos.
pedrinbdn
10 de noviembre de 2010 a las 15:24con el coche que mas he disfrutado es un honda crx del 89,de 130cv.Eso si que se comia las carreteras de montaña.Es pu… kart!!!!!!!
Edro
10 de noviembre de 2010 a las 16:02¿Os acordais del citroen Xantia Activa? Más de 1G de aceleración lateral. Hoy en dia no se ha vuelto a poner el listón tan alto en la hidroneumática…
Y si, yo también pienso que los buenos coches acabaron a finales de los 90
lono86
10 de noviembre de 2010 a las 16:19a mi lo que me asusta son los Euro4 Euro5 Euro6 y su p___ madr_
neich_clarke
10 de noviembre de 2010 a las 23:11muy buenas!! soy poseedor de un subaru impreza wrx de 2006, tiene 240 cv, no tiene más ayudas que ABS, y no pienso que tenga un coche muerto ni mucho menos… estoy de acuerdo con el artículo en muchos puntos, pero las conclusiones me parecen un poco extremas, bien es cierto q las marcas están embarcadas en una guerra de caballos, mas q de prestaciones, yo tambien añoro ver interiores como los del F40 o el Mclaren f1, y no los de los superdeportivos de hoy en dia. el problema es q hoy creo q se venden mas coches de este corte q antes, pero muchos compradores de esos coche nunca se lo comprarían con interiores espartanos y puramente deportivos, quieren llevar un superdeportivo por fuera, debajo del capó y todo el lujo de sus yates dentro y por supuesto q la centralita del coche me ayude a parecer tommy makinen. en fin q yo con mi coche encantado y es posterior a la fatídica fecha un saludo y gracias por leer
bklstyle
10 de noviembre de 2010 a las 23:41Vale, yo no he tenido coches muy antiguos, dado que mi edad no supera los 30 aunque si que se acerca, de pequeño conoci todos esos coches que ahora son mas «puros» que los de ahora, pero jamas tuve la posiblidad de conducirlos, pero a pesar de ello he aprendido a conducir en un coche bastante «puro» por lo que creo que me ha sido bastante util. Se trata de un Toyota yaris 1.3 86cv, vale que tiene direccion asistida, pero no tiene ni abs (era opcional) ni control de traccion, de estabilidad menos… asi que excepto por la direccion asistida y el motor de inyeccion era bastante puro. Y me lleve buenos sustos con arena y lluvia, creedme, aunque jamas me di un golpe, y a dia de hoy tampoco.
Tambien tuve un Mercedes 300-D del año 89, pero la verdad era bastante burgues, como suele ser en los mercedes… Ya poseia ABS, direccion asistida, elevalunas en los 4 cristales, climatizador (manual de rueda, eso si) era automatico, con asientos de cuero calefactables… aunque aprendi bastante de el con la traccion trasera y me hacia mis buenas cruzadas, jejej.
Despues ya con mis primeros trabajos pude comprar mi primer coche nuevo, un astra GTC 1.9 150 diesel, eso si, mas que nada porque iba a ser mi coche de uso intensivo, y mi economia no queria que dependiese de mis padres, por lo que no podia permitirme un 2.0 turbo de 200cv o un opc, mas que nada por el consumo abusivo.
Siempre me ha gustado la potencia, y ya mi idea entonces era reprogramarlo pasados los 50.000km, asi que ahi esta, con 196cv, un autentico tiro.
El ultimo coche que tuve fue un Mitsubishi 3000GT VR-4 twin turbo, de 320cv y traccion 4×4
Una jodida autentica bestia, con la esencia de los motores de los años 90, pero estaba bastante aburguesado tambien, con climatizador, asientos de cuero electricos, control de crucero, abs, direccion asistida, dvd y tv, 6 marchas, suspension electronica…. una autentica maravilla, pero que ya tenia la tonica de los coches modernos, 1650kg, traccion 4×4…. en las curvas cerradas era un poco cabezon y pesado, pero eso si, habia que tener muchos cojo… y valor para ponerlo al limite en curvas, y nunca he conducido nada que me de tantas sensaciones al acelerar, era impresionante, aceleraba como un m3 e36, pero la sensacion que daba al hacerlo era como si tuviese el doble de caballos, justo lo que yo queria!!!!
Desgraciadamente tuve que venderlo por economia, aun asi guardo mis mejores recuerdos de ese coche, algun dia volvere a tenerlo, porque merece mucho la pena.
Excepto por esos coches, todo lo que he podido «catar» han sido coches modernos, pero eso es lo que tenemos hoy dia, tienen sus inconvenientes y tambien muchas ventajas, no lo olvideis…
Colin Chapman
11 de noviembre de 2010 a las 09:08He dejado de leer el artículo a la mitad porque sinceramente me parecía una pataleta de conductor novel.
«El fin de los coches» puede ser un pensamiento válido para aquel que la palabra «coche» sólo le evoque un vehículo de carreras.
Le guste o no, un SUV es un coche, un Hummer es un coche y una C4 Picasso también lo es. Cada uno con su mercado, su clientela y diseñado para cubrir sus necesidades.
Si el dueño del artículo quiere algo, por lo que leo, pequeño, ligero, juguetón y poco seguro, creo que su sueño húmedo pasa por darse unas vueltas a lomos de un cortacésped.
jarnu
11 de noviembre de 2010 a las 18:39@Colin Chapman:
Todo lo que tiene cuatro ruedas y un motor, y tamaño suficiente, es evidente que puede llevarle del punto A al B. Y puede denominarlo como le plazca aunque sea automóvil etimológicamente correcto.
Creo que la falta de opciones, de variedad, en cuanto a características técnicas, configuraciones, acabados, motorizaciones, precios, tecnología, habilidades, peso, potencia, tamaño, consumo, seguridad, responsabilidad, etc., etc., es la queja del artículo. Que la tendencia es general, que la progresiva homogeneización de los productos, de las marcas, gamas, estéticas, mecánicas y demás, están entristeciendo el placer que antes ocasionaba el reto de hacerse con una de estas máquinas y dominarla, y que era una habilidad no extrapolable a otra marca o gama, donde sus propios aficionados se posicionaban según gustos o sensaciones. O nivel de dificultad.
Como sabrá, la mercadotecnia suple violentamente el hueco emocinal creado por esta homogeneidad. Y nos intentan convencer personas como usted de que una guagua, con las mismas ruedas si no es muy grande, es igual de segura, placentera y retadora que un alfa GTV del 80 con el Busso bajo el capó y como que no. Pero el mercado y sus estrategias de maximizar beneficios, y no tanto las leyes Euro-X o las de seguridad pasiva, son los que han creado en los mercaderes la estrategia de que compartir es más beneficioso, económicamente, para todos ellos.
Lo admito, lo admitimos. Y ahora, que me dejen en paz con su nuevo utilitario turbo de metro y medio de alto y poco más de ancho y 1300 kilos de peso, con su motorcillo colgado por delante del eje delantero y sus suspensiones McPherson y eje de torsión. Que me dejen de decir una y otra vez que su plástico y pegatinas, que sus llantas y neumáticos de perfil bajísimo, que su esbelta figura de furgoneta de reparto, que su ‘DNA’ de competición en una copa monomarca, que sus relaciones de cambio larguísimas y más marchas de las necesarias para ahorrar en autopista, que su GPS y sonido multicanal, que sus mullidos salpicaderos y alfombras persas, que sus 300 litros de maletero y sistema para silla de bebé, que sus xenón y start-stop de motor en los semáforos, que todo eso, hace un deportivo.
Un deportivo nace, no se hace. Un deportivo no es una mula de carga, no es una silla de bebé glorificada, no vas tranquilo por los bulevares intentando no rallar la pintura tricapa, no es una tranquilidad por tener un gran precio de reventa, no es mirar hacia el futuro.
Condenas, señor Chapman, a un hedonista (¿epicúreo mejor?) porque reclama para sí lo que usted abandonó por decisión propia. Asúmalo y conduzca con precaución, como todos los demas.
Un saludo y perdón por la extensión.
Colin Chapman
12 de noviembre de 2010 a las 00:06@jarnu
Acorde a mi nick, me reconozco gran fan de los vehículos deportivos, ligeros, ágiles, y jueguetones. Pero no por ello cierro mi mente a pensar que sólo eso se le puede llamar «coche».
¿La muerte de los deportivos? En menos de una década el más pequeño de los Ferrari se come (literalmente) al más grande de todos ellos (F40) y sucesores (F50).
Hablando de cavallinos, ¿es quizás el California un crimen por apostar por lujo (techo retráctil) antes que por ligereza?
¿Es quizás un Panamera un balazo en la sien de las marcas deportivas?
No se equivoque, soy amante confeso de los motores turbo, de los centros de gravedad bajos, y del peso bien distribuido.
Comparto la idea de que los coches han cambiado mucho, y que se han dejado parte del encanto por el camino. Pero el aumento de seguridad, de electrónica, de confort y habitabilidad (ya no tenemos la estatura de Alfredo Landa) hacen que perdamos un poco ese encanto pasado.
Pero no por ello no me maravillo con la precisión alcanzada con las maquinarias actuales. A su lado, un motor de los 90 es del jurásico. Turbos de geometría variable, inyección directa, apertura de válvulas controlada electrónicamente, cambio secuencial de doble embrague, suspensiones magnéticas, aerodinámica «inteligente»…
¿Que transmiten «menos»? Sí.
¿Que a todos nos gustaría que se hicieran más coches del tipo Lotus o Mazda Mx5 o cosas similares? De acuerdo.
Pero caray, cada día son más perfectos. Más precisos.
¿Quizás añoramos un «back to basics»?
jarnu
12 de noviembre de 2010 a las 11:50@Colin Chapman
“back to basics”? Perfecto, lo resume.
No aludí a su nick -admirable- porque quería argumentar sobre su mensaje y no sobre el mensajero. Me gusta saborear las diferencias -clásicas- de las ideas entre los Ferrari de antaño y los coches ideados en Hethel. Frente al ‘usted paga el motor, el resto se lo regalo’, esa ‘no me dobles la potencia, divídeme el peso’, frente a esos chasis primeros de Enzo, bastante problemáticos y hasta rústicos, esos Lotus que, hasta hoy mismo, siguen siendo epítome de puesta a punto perfecta en tacto de dirección, en rigidez y suspensiones, una referencia. ¿Y el motor? Cualquiera que cumpla unos mínimos, el chasis hace el resto. Ojalá perdure la posibilidad de ‘elegir’ entre los italianos y ese inglés. Pero visto los nuevos proyectos de Lotus lo dudo.
El Ferrari California, ese intento de mercedez Benz SL, es un ejemplo de fabricante que añora la clientela y mercado copado por los alemanes, y no lo disimularon, justificando que querían atraer a las mujeres pudientes, o de los pudientes, con ese vehículo. Ese nuevo Giuletta, ya en tacto clon del Golf, según dicen, más de lo mismo -y ahí reside su atractivo, insisten en la prensa ‘seria’ del motor, que ahora sí, ahora es más vendible y comprable-.
Yo lo veo claro. Han conseguido que nuestra ‘tranquilidad’ como consumidores -a base de bien untarnos cada pocos segundos con sus mensajes publicitarios- vaya pareja a cualquier acercamiento a la referencia del mercado: los coches germanos, todos. Citroen ya no es lo que era -línea DS, C5, ninguna referencia tecnológica en su propaganda a sus suspensiones, sino al ‘carácter alemán, espíritu francés’-, ni Saab con el nuevo 95, ni Lexus, ni Jaguar, ni un montón más que, como son Volkswagen, pues ya no cuentan como no-alemanas intentando serlo. ¿Lamborghini? Más propaganda hablando de sus mejores acabados ahora, y de su nueva fiabilidad. Ya se pueden comprar con tranquilidad, antes no, antes no. Aunque sigan usando -a punto de desaparecer-, un chasis tubular en acero -creo recordar- que es de los pocos que aguanta ese V12, y lo lleva haciendo décadas, ni los nombres propios ilustres que desarrollaron los primeros de la saga: Dallara -¡ese chasis!-, Stanzani, Gandini. Ahora unos señores alemanes saben mejor que nadie lo que necesitamos y lo que necesitan los coches, cómo hacerlos más fiables y con mulliditos salpicaderos.
No pararía pero debo dejarlo, creo que mi postura está clara. Mercedez Benz en los principios de los 90 introdujo decenas -dicen que centenares- de kilos extra en materiales insonorizantes en la carrocería. Lo resume todo.
Y ni he empezado a hablar de la electrónica. Mira por este blog qué es un Porsche Torque Vectoring y asústate. Se quejan del Nissan GT-R y éste tiene lo mismo…
Aser
14 de noviembre de 2010 a las 15:11Toda la racon del mundo. Yo tuve un R 5 turbo copa y eso si que era una gozada.
Burgues moderno
14 de noviembre de 2010 a las 16:25Simple y llanamente, los coches de hoy en día se han aburguesado.
Prueba Ferrari F355 Spider, puro placer - 8000vueltas.com
14 de noviembre de 2010 a las 22:08[…] Tras el polémico y discutido artículo de entrada “El fin de los coches”, no podíamos terminar con un punto y aparte o con nuestro característico extra lap particular. […]
Fernando
15 de noviembre de 2010 a las 01:39Muchas veces no se encuentran las palabras para definir una idea, pero delarosa lo ha hecho estupendamente. Sí, los coches de antes quizás eran peores que los de ahora, pero tenían alma, o al menos hacían mejor sintonía con los que nos gustan los coches, que muchos último modelo repletos de sistemas electrónicos, que lo hacen todo por nosotros.
La mayoría de ellos no se sienten, no se gozan, no te hacen reír, ni provocan nada. Simplemente tomas el volante y lo diriges hacia donde quieres ir y mueves el pie para acelerar, porque algunos hasta frenan solos.
Un gran saludo
rulo
15 de noviembre de 2010 a las 02:58estoy deacurdo con este articulo… no se si sea asi pero para los fanaticos del automovilismo estamos consientes de que poco a poco se estan hechando a perder los autos y se nota luego luego en los nuevos tipos de cambios «tras el volante»… yo prefiero una palanca convencional.. que en vddse sienta la velocidad pura
oscar
15 de noviembre de 2010 a las 13:27Una pregunta al respecto: si los ingenieros creadores de los coches que añorais hubieran tenido la posibilidad de incorporar los medios de hoy en día, ¿lo hubieran hecho? Creo que para desplazarse por las carreteras los coches de hoy son infinitamente más cómodos y seguros. Para las sensaciones cerca del límite (del coche y del conductor) mejor un circuito. Quede dicho que soy clasiquero a tope, y echo muchísimo de menos el fiesta mk1 con el que me estrené.
saludos a todos
monoblock
15 de noviembre de 2010 a las 15:12Caramba, menuda discusión por constatar un hecho tan evidente a estas alturas. Un catálogo de vehículos nuevos, en este siglo, no es muy diferente a uno de electrodomésticos, ordenadores o cualquier otro cachivache electrónico. Podrán añadir siglas, maquillajes y las justificaciones que quieran para disfrazar una «batidora» de deportivo, pero no será ni la sombra de aquellas máquinas excitantes que no tenían en cuenta ni límites de decibelios, ni descontaminación, ni comodidad, etc. Las mejoras en seguridad eran necesarias, pero de ahí a «matar» el carácter que marcas como Lotus todavía conservan va un abismo. Seguramente ya no hay vuelta atrás, porque la tendencia actual es cargar un coche con extras de confort hasta los topes. Eso es totalmente incompatible con las sensaciones, por el peso y el «adormecimiento» al volante que conllevan. De todas formas, un clásico tampoco es la solución ideal, porque su propietario se pasa horas colgado del teléfono buscando recambios descatalogados y luego no se libra de las inoportunas averías que se repara él mismo, llegando tarde a los sitios. Cuando alguien se retrasa en una cita, al final aparece sudado y lleva las manos sucias, en seguida piensas: «mira, este tiene un coche clásico, se le ha estropeado por el camino y lo ha tenido que ajustar tan rápido como ha podido». Conclusión: ni los coches de ahora son tan emocionantes, ni los de antes eran tan perfectos
Ruben_89
15 de noviembre de 2010 a las 23:24Esto es una realidad como un templo, quizás no sea el fin de los coches pero si el fin de los coches que se hacían para disfrutar. En los 80 un 205 GTI o alguno similar podía darte todas las sensaciones del mundo mientras que hoy hace falta un superdeportivo en toda regla para conseguir algo parecido.
Nadie puede negar que la electrónica ha hecho que los coches actuales sean mas seguros, eficientes, confortables y muchas cosas mas pero han perdido el carácter que tenían los de antes.
Me hace gracia ver ahora a personas que dicen ser amantes de los coches, que flipan leyendo en una revista que un coche tarda poco más de 3 segundos en hacer el 0-100 y luego cuando ven a alguien poniéndolo a prueba lo llaman asesino, la gente hoy en día piensa que los deportivos están hechos para hacerles fotos en vez de para conducirlos, ese es el problema.
Motocar
16 de noviembre de 2010 a las 01:29Muy buen articulo, balance entre lo viejo y lo nuevo, de lo nuevo detesto tener que enfrentar las fallas mediante solo dos herramientas, 1.- Una buena afiliacion a un seguro con servicio de grua y 2.- Cobertura para mi celular…..
En aquellos viejos autos todo se resolvia con pocas llaves, destornilladores y una buena lampara de testear con su bombillito y eso si maña, habia que conocer a nuestro querubin, hoy dia imposible a menos que hagas un grado universitario en ingenieria, uno por cada especialidad, Electronica, sistemas, mecanica, hidraulica, electrica etc etc etc……
La conduccion es otra cosa, tanto evolucionaron los F1 que tuvieron que dar marcha atras y prohibir todos los elementos de ayuda al piloto, los llamaban «Pilotos de Videojuegos» y hoy deben enfrentar los circuitos con habilidades propias, cosa que no sucede con un moderno sedan con frenos ABS, control de traccion, suspension activa, cambios automaticos CVT, Radares y muchos juguetes mas que en verdad le han quitado emocion al conducir, eso si han aportado mayor seguridad pasiva, pues nos dicen que si chocamos hasta 60Kmh saldremos vivos, cosa que no sucedera en uno de esos viejos clasicos, por llamarlo de alguna manera.
Estuvo entretenido el articulo y mas ilustrativa todas las opiniones aqui expresadas, mis respetos y exitos a todos. Motocar
DSA
17 de noviembre de 2010 a las 21:38Felicidades por el articulo me he sentido muy representado en el.
Desde muy joven siempre me vincule y mucho a los coches mi primer coche fue un alfa GTV 2000cc del año 1972 lo compre de ocasión en el año 1989 con 16 años de edad al compraventa le fui dando dinero a cuenta hasta que cumplí los 18 años y lo saque de la tienda (dos años y ni lo vendió je je )
Después empezaron a pasar por mis manos otros modelos Renault 5 turbo, Renault GT turbo, Clío 16, Clío Williams, corsa GSI, 205 rally, 205 GTI.
Sierra croswort. Etc. etc. hasta que conseguí lo que tanto , quería tener un 911 turbo , del año 2005 pues decepción la mía no ha sido ni por asombro ningún broche de aquellos nostálgicos coches que había tenido, si muy rápido mucha tracción pero cuando lo ponía por tramos muy serpenteados los dichosos controles de tracción y de frenadas hacían su buen trabajo y para mi, mi castración de mi conducción, con ello he llegado a la reflexión de que cada vez uno (al menos yo ) quiere mas y mas y cuando tienes esos 450 cv no los puedes aprovechar como uno quisiera por los dichosos controles electrónicos actuales en la mayoría de los coches . y como comentan por aquí ahora estoy en la busca de un seven , 500 klg de peso nada de controles y tracción trasera, es decir que prima lo de antes un saludo y disculpen el ladrillo quería exponerles mis reflexiones ( todo lo descrito es bajo mi punto de vista, con ello no quiero trasmitir para nada en ningún momento que los 911 no sean unos buenos coches, por descontado lo son, pero no para lo que yo buscaba en ellos, quizás si hubiese cogido un 911 tracción trasera del los años 80 seria otro cantar un saludo) .
BasraQ5
20 de noviembre de 2010 a las 22:59Una de las razones por las que los coches se han hecho más pesados es porque ha aumentado la resistencia y seguridad frente a impacto. Y esto es siempre bueno.
Otra es que ha aumentado la rigidez torsional. Y esto también es siempre bueno.
Otra es el aumento de sistemas debido a la normativa de reducción de emisiones contaminantes (catalizadores, recirculación de gases, etc) y esto es siempre bueno (no creo que haya nadie que quiera más contaminación).
Otra es el aumento de sistemas de control electrónico. Siempre que sean desconectables a voluntad, para los ratos en que queramos una conducción más pura, son siempre buenos, porque aumentan enormemente la seguridad y la eficacia del coche.
Y otra es el aumento de tamaño, como se ve en casi todas las fotos. Aquí sí que estoy totalmente en contra. Para los utilitarios y coches familiares vale, pero para coches deportivos no, por favor. ¿Porqué un coche tan eficaz y bonito de conducir como un Porsche 911 GT3 tiene que ser tan grande? No lo entiendo. Si fuera más pequeño podría ser más ligero.
Quiero un 993 con tecnoloǵia de 2010.
Saludos.
Emilio
20 de noviembre de 2010 a las 23:04Ya escribi mi opinión, pero ahora pensando detenidamente, y buscando el «vaso medio lleno» me doy cuenta de que en el fondo, seguimos siendo iguales, hace 10 años veias a un hombre con un Deltona, y te quedabas mirando el coche, pero nada mas, hoy en dia, vemos un Deltona ( lease deltona, mazda 323 gTR, ford sierra cosworth, mazda mx5, lotus elise) sabemos que es uno de los nuestros, que es alguien que le gusta conducir, que sabe la maquina que conduce y que es un «aficionado». A mi particularmente me reconforta ser diferente, tener un coche con 15 años que sigue dando guerra, y que en mi caso (soy hondero), estoy totalmente seguro que les pego 10000 vueltas en fiabilidad y facilidad de mantenimiendo. Habiendo mercado de segunda mano, aun tenemos nuestro huequecito, y podremos seguir buscando cacharros que nos hagan sonreir en una carretera de curvas, o en un circuito.
964
23 de noviembre de 2010 a las 00:08Magnifico articulo de la mejor web sobre automoviles que hay en castellano.
Yo tambien me he sentido identificado.
Todos los coches que he tenido finalizan en los 90
Un audi 80 quattro del 84 un prelude del 85 un 190 16v del 88
Un porsche 968 del 92 y ahora un 964 carrera 4 del 91
Siempre buscando y encontrando esa alma i personalidad que tenian los coches antes de que las leyes y los financieros matasen todo ese encanto..
Mejor para nosotros que encontramos en coches usados lo que ningun coche actual nos puede dar sensaciones emociones historia.
Felicidades otra vez
MIGUEL
1 de diciembre de 2010 a las 00:33Hola acabo de encontrar por casualidad este blog y la verdad es que me encanta y me siento muy indentificado con algunos articulos.
Principalmente con este, mi ultimo coche que me he comprado ha sido un NISSAN 200sx s14a del año 2000. Esun coche con motor de los de antes 2.0 turbo con traccion trasera y sin ayudas.
Saludos y seguir asi.
Porsche 993 Targa, el hermano maldito - 8000vueltas.com
1 de diciembre de 2010 a las 01:49[…] Lo más fascinante de la época del 993 y del F355 es que no estaban absorbidos por la electrónica, pero tampoco se les puede considerar coches antiguos. Es una época en la que los fabricantes de deportivos tenían en mente una idea de conductor exigente con las sensaciones y el control de la producción era lo suficientemente bueno como para considerarles generosamente fiables. De ahí nuestro titulo “el fin de los coches“. […]
[8000vueltas.com] Porsche 993 Targa, el hermano maldito - BMW FAQ Club
1 de diciembre de 2010 a las 20:26[…] […]
Otto
5 de diciembre de 2010 a las 17:24un buen articulo. Cierto es que en los coches actuales para sentir que vas rapido tienes que ir a 120 por sitios de curvas o a 200 por la autovia para sentir una ligera sensacion de velocidad. El coche mas moderno que tengo es un r21 del 89 de 120cv y si anda lo suyo por que los caballos mandan pero sigue siendo moderno para mi por que a 160 no notas velodidad alguna… asi que con los actuales ni te cuento. Cuando me voy de tramo me suelo ir con un Renault 7. A la hora de crono me supera cualquier coche con unos pocos caballos y una susp normalita ya que con el r7 para hacer tiempos tienes que ser un walter rohrl por decir un buen piloto de los GR:B. Es con el coche que mas me divierto con diferencia y es el que menos cv tiene y el que peor supension pero es lo mas divertido y dificil de conducir. Para divertirse no te hace falta grandes velocidades ya que a bajas ya es dificil de llevarlo por lo «negro». Los modernos para diario. La Deportividad que lo dejen a los coches sin controles de ningun tipo, la electronica que la dejen para la competicion que es donde tienes que arañar decimas.
Alexuny
9 de diciembre de 2010 a las 15:47Yo creo que decir que hoy en día muuuuuchos coches no tienen alma no es ninguna blasfemia. Es una realidad. Menos para el que no sabe/quiere apreciarlo. Y si estamos equivocados, pues ya se sabe que los viejos rockeros nunca mueren. Eso para empezar.
Pero en lo demás… creo que el tema de que un coche deportivo debe trasmitir sensaciones es una verdad a medias. Un deportivo lleva intrínseco transmitir sensaciones de una u otra manera. Antaño no eran nada extraños los latigazos o viajes serios de los Fittipaldis por las cunetas, y hoy no son nada extraños otros viajes serios por sobrepasar los límites de otra forma.
Pero lo que siempre tendré presente es que en los genes de un deportivo también va el reventar el cronómetro cuando tiene la oportunidad. ¿Transmite un R5 turbo más sensaciones (o sea canguelo y avisos «dequetematas» a tutiplén) que un Clio RS actual? Sí. Pero mételos en un circuito compensado para ambos, que me da que al R5 le salen los colores.
Y sí, el Clio RS pesa «un huevo» más. Pero ‘¡ding, dong! ¡llamando a abuelo!’… ¿no era también muy normal antaño pensar que porque un coche pesara 100, 200, 300 o 400 kilos más es que ya era una cosa torpe, lenta y menos efectiva en deportividad? Pues aquella realidad ya lleva muchos años superada.
Adoro el Ferrari F40 (entre muchos otros). Y el McLaren F1. Y el CLK-GTR. Y el adorable Honda NSX (noventero, con faros escamoteables y hasta 1995 con techo y montantes en negro please). Y el Ferrari F50. Y un Lamborghini Countach y Diablo más que un Murciélago, Reventón y Gallardo juntos.
Pero aunque estéticamente me guste menos, parece que un Ferrari Enzo les saca los colores (mientras lo huelen) a los tres en circuito. Donde la deportividad alcanza su máxima expresión. Y los otros sí, trasmitirán más al piloto (que transmitir puede ser hacerlo ir más tiempo con las gónadas a ciertas alturas de la fisonomía nada habituales). Pero lo cierto es que para que ésto lo sienta igual el que lleve el Enzo, significaría que alguno de sus rivales ya se habrían ido en alguna cuneta o escapatoria con un susto de los gordos.
Creo que gustos a parte, es una tónica general confundir lo que es pasional y sensacional (diga lo que diga el crono) en la calle con «deportivo». La competición es una cosa, la serie o coche «con matrícula» para circular otra. Pero para mí un deportivo no sería tal si al entrar al circuito no se mea literalmente como poco en su homólogo anterior. Si ésto no sucede así o gana por muy poco, entonces sí digo ‘¡amigo! tenéis un problema!’
tortxuman
11 de diciembre de 2010 a las 14:58Hay algo que me parece que, o no queremos entender, o no lo intentamos entender, de normal escribimos en los foros gente de entre ventimuchos y cuarentaypocos y siempre nos estamos quejando de «los coches de antes eran mejores, daban mas sensaciones», tenemos la larga suerte de que hemos probado ya 30 años de coches, y tenemos suerte de que nos sedujeron los ultimos carburacion verdaderos. Pero somos unos tontos melancólicos. Si, echo de menos mi xantia v6 activa, verdadera fiera de las curvas, poder subir un puerto a 140 y bajarlo a la misma velocidad, y con unas buenas gomas, no habia leon FR que me cazara hasta ponernos en recta, donde su enorme tintorro delataba que ya se habia cansado de ir a mi rebufo. Pero pensemos, ¿no hemos escuchado a padres o abuelos haberse quejado de que «su 405 no le daba las mismas sensaciones que su supermirafiori»? ¿o que un señor Gordini se ventilaria al niñato del R-19 turbo? Volvemos a lo mismo, que sentiran los chavales de ahora dentro de unos años, que nunca han probado el placer de llevar un alfa 33 trebole, un corrado, un calibra, un senator 3.0 o inclusive, un zx volcane en su momento. Ellos pensaran que el clio sport se comeria a un clio o como se llame de dentro de 10 años, y asi sucesivamente.
Fabio
12 de diciembre de 2010 a las 05:28Este blog es sublime, coincido con este post en algunas cosas, otras no tanto pero es sublime, este blog es sublime. Algún dia probaré estos coches en persona y te diré si llevas razón. Un saludo!
Gilles
14 de diciembre de 2010 a las 05:20Aqui hay muchos que critican exacerbadamente el post,debo decirles que hay personas,como Delarosa y como yo que simplemente somos romanticos,nos gusta conducir sentir,disfrutar, que el volente nos cuente lo que la maquina quiere,no simplemente ir a 140 por la autopista,con un ESP trabajando,yo adoro los coches clasicos,darme un 124 FU restaurado y preparado y sere feliz.
PD. tengo un 306 Xs HDI no corre mucho pero me lo paso pipa cuando llegan las curvas.
Anónimo
26 de diciembre de 2010 a las 13:56[…] […]
Iván
12 de enero de 2011 a las 23:28Señores a quien le moleste este post, no tiene el espiritu del cual se habla.
Como orgulloso propietario de un z3 coupe 2.8 de 193c.v. hablo con suficiente criterio como para constatar el cambio generacional.
El punto en el que dice: todo está duro, de manera poco ergonómica y no parece que sea muy efectivo.
Eso lo experimente el primer dia que lo conduje, era claustrofóvico, incómodo, los pedales extremadamente duros y el cambio ruidoso. En cambio a dia de hoy si pruebo cualquier otro vehículo moderno(posterior al 2000) noto que los pedales son tan electrónicos que no transmiten con exactitud y precisión tus actos, la dirección peligrosamente sensible, etc. …
Si realmente te gustan los coches y la velocidad, no te compres un coche moderno, potente, pesado y fácil de manejar, adquiere uno que sea duro, incómodo, ligero y que te exiga como piloto el saber conducir, entonces entenderas todo esto.
Saludos
fernando
21 de enero de 2011 a las 04:28vamos el articulo esta mas acorde a ala realidad de lo se comenta la sensacion de velocidad en deportiva de hace unas decadas no se compara con un auto nuevo toda esa ayuda electronica como bien dice a cualquiera que pise a fondo el acelerador lo hace parecer un piloto ya muchas comañias automotrices se estan dando cuenta de esto y estan comenzando a hacer sus autos mas «emocionantes » quitandole un poco de ayuda electronica y dejandole una buena palanca de cambios no un cambia de doble embrague pero en fin hay que disfrutar el momento de los autos antes que estos llegen a ser muy verdes.
Racing
17 de mayo de 2011 a las 18:10Los modernistas ullen de lo clásico o lo divertido… solo se mira lo SEGURO..
los deportivos de antes como bien se dice no son peores que los de ahora.. sino que son como deben ser.. DEPORTIVOS… y los de ahora en una sociedad minusválida.. hay que vender coches SEGUROS…
es como lo de «NO PODEMOS CONDUCIR POR TI»… NADIE LO ESTA PIDIENDO… simplemente «NO TE DEJAMOS CONDUCIR»
estamos en un mundo lleno de ovejas… siguemodas… y los que nos salimos de ahí somos bichos raros..
jarnu
21 de mayo de 2011 a las 09:41Pese a que todo parezca oscuro, y lo admito, me resisto a creer que algo como el automobilismo como afición, como cariño, como ilusión y como satisfacción se diluya.
Europa entera está legislando muy duramente en contra del transporte privado, personal y autónomo. No hablo de las leyes para ir presionando a los fabricantes. Éstos manejan bien esos temas. Hablo de un pobre individuo que, por trabajo y circunstancias, por vivienda -la jodida vivienda- o por la familia y la convivencia, por respirar la ancha castilla o un valle camino de Azpeitia, NECESITE un coche.
Vivo ahora en un país donde sin coche no puedes sino ir al baño de tu casa, donde cuesta dos duros -por trámites burocráticos- sacarse el carné -y sí hay exámen teórico y práctico-, donde la gasolina cuesta la mitad, los coches no tasan muchos impuestos ni al adquirirlos, ni por rodaje -digamos que lo llaman ‘registration’-, ni por el ‘smog check’ para comprobar como la ITV si sigue sano.
No estaré mucho pero ahora sé que nos mienten y mucho, muchísimo. Que un coche, cualquier coche, el que puedas o quieras permitirte, no es un lujo, como no es un lujo una nevera ni una lavadora. Es para vivir mejor y más libres, para decidir dónde y cuándo sin depender de otros, para descubrir más rincones y más lejos. Para llevarte alegrías e improvisar viajes, para ir y volver a tu hogar con los tuyos cuando tú quieras y los tuyos te necesiten, no cuando el ‘servicio público’ estime oportuno. Tiene un precio, eso sí, por eso existen muchos productos, gamas y destinatarios. Pero, ¿un lujo? ¿Un lujo como dice los que nos gobiernan en la piel de toro y en Europa? Eso, el transporte sin coche, es un lujo para los jóvenes con tiempo para vivir su vida a su ritmo y para los ricos que, cuando lo necesitan, se montan en AVE, en un avión sin mirar las ofertas y sin meses de antelación, o no tienen unas cortas vacaciones que no desean dilapidar en un tren durante un día para ver el otro extremo de país o el de al lado.
Por aquí he visto más coches viejos y destartalados que en España. Muchos más. Y he visto muchos coches que sobreviven después de pasar por muchas manos. He visto gente sin demasiados recursos, curritos, tener y mantener un coche, o dos, según la cantidad de miembros que necesitan desplazarse a diario a sus deberes. Y más cariño, conciencia, preocupación, interés y responsabilidad por el tema ‘coche’, muchísimo más vital.
No puede existir un fin de los coches porque no hay alternativa, no disponemos de ella. Si los burócratas ricos, los mal llamados políticos, en el centro de Europa, creen que hay alternativa, y la imponen por la fuerza de las normas, ya buscaremos camino. Porque la necesidad no desaparecerá.
Moiluck
1 de junio de 2011 a las 13:39Señor Delarosa,
Estoy totalmente de acuerdo con su opinión respecto a este tema. Me alegra enormemente saber que hay más gente como yo ahí fuera.
En mi caso muchos me consideran un ser extraño por tener coches «pasados de moda». Actualmente tengo un Ferrari 348 Ts, un Honda S2000 y un Honda Del Sol (bastante mejorado). Cada vez que «piloto» uno de mis coches por una buena carretera me siento el tío más felíz del globo, y estoy seguro que algún minibus moderno de estos puede llegar a ser más rápido que yo en recta, pero no hay nada comparable a las sensaciones tan puras, directas y radicales de estas máquinas, o a ese sonido de un v8 Ferrari de principios de los noventa, a sentir el motor de 2000 c.c. del S2000 a 9000 rpm, o trazar las curvas en un Del Sol de menos de 1000 Kg sin miedo a que la inercia lleve a los neumaticos al límite de aderencia.
JDM Legends, otro modo de hacer las cosas - 8000vueltas.com
10 de julio de 2011 a las 14:18[…] encanta lo que dice de la cultura japonesa, de su filosofía por el trabajo bien hecho. Otro El fin de los coches, esta vez en […]
Resurrección, regreso al pasado sobre 4 ruedas - 8000vueltas.com
13 de julio de 2011 a las 00:16[…] Reencuentro con la agradable sensación de control (o descontrol) que te permiten tener, que te otorgan, los coches que ya tienen unos años encima. […]
edi
13 de octubre de 2011 a las 16:28Pedroloooo
Carrera hasta los 100 - 8000vueltas.com
24 de octubre de 2011 a las 10:42[…] a las 8000vueltas. ¿En qué época de la automoción hemos podido decir esto? Todo empezó el día en que decidiron acabar con los coches, pero lejos de conseguirlo hemos experimentado ciertas […]
GOVI
11 de noviembre de 2011 a las 18:43Estoy totalmente deacuerdo con el artículo de 8000vueltas.
Todos hemos escrito muchos comentarios, y poco queda por añadir, pero me ha llamado la atencion un comentario de una persona que ha escrito:
» pero hoy en día lo que se lleva es tener un coche forrado de asistencias electrónicas que te salvará de la galleta si te flipas más de la cuenta al volante, y en caso de que te la pegues, con una pesada estructura de acero bien estudiada que te salve la vida.»
Ya sabemos que los coches son cada vez más seguros a la hora de un golpe… tienen airbags, estructuras diseñadas para absorber el impacto…..
Pero he observado que antaño, con una «castaña» de coche, cuando te salias de una curva por ir «flipado», pues igual te salias a 50km/h, por poner un ejemplo, y además, el coche castaña ya te habia avisado de lo que venia.
Hoy en dia, en la misma curva, y con un super utilitario efectivo, con todos los ABS, DSC etc etc, te flipas y te sales de la curva. Pero te sales a 100km/h y sin darte cuenta. Es más seguro??
Un saludo a todos
Bruno
24 de diciembre de 2011 a las 22:26Cuando estaba mirando coches, para comprar, estuve mirando los compactos que tenia todo el mundo, pero ninguno me convencía, no era el coche que yo quería, mucha pijada electrónica, muchos adelantos en comodidad e insonorizad. pero a la hora de la verdad no me hacían sentir nada.
Indagando me tope con el BMW 1 coupe 125i, pregunte por aquí, pero no era lo que yo necesitaba o quería.
Hasta que un día me dio por mirar y encontré un modelo que se asemejaba a lo que yo quería, propulsión, potente, reparto de pesos, controles de tracción desconectables. Pasaron dos años, hasta que encontré una unidad que había querido siempre, pero se me quedaba lejos.
Un Mazda MX5 limited edition solo se fabricaron 2500 y de ellas llegaron a España 135, es el full equipe del MX5.
Una de ella es ahora mi maquina. No es un Ferrari, ni un coche de alta gama, pero es mi deportivo.
skakeao
11 de febrero de 2012 a las 22:34Desde luego es un tema controvertido y sumamente subjetivo. Pero sinceramente, me da igual lo que piensen los demás. No creo que me compre un coche nuevo nunca, no hay nada como montarme en mi nissan 200sx del 97 y dar gas a la salida de las curvas para salir de ellas sobrevirando para, acto seguido, contravolantear, colocarlo otra vez en su sitio, hacer punta-tacon y lanzarse a por otra curva más de un buen puerto de montaña, con solo 4 aliados a tu favor: la dirección asistida, los frenos con ABS, el diferencial autoblocante y tu propia «habilidad» al volante. Aún a dia de hoy, las prestaciones de este coche son impresionantes, al igual que el placer de conducirlo. Muchos incautos sirven de muesca para mi vieja hacha de guerra, lo que me hace apreciarlo aún más. Efectivamente, para mi ha muerto el concepto de coche deportivo desde el año 2000, quedando como unico recuerdo los «buenos tiempos» en los que los coches eran purasangres que habia que domar. Todo un reto.
Los buenos deportivos, deberian de ser ligeros, por simple física. No se pueden eliminar el mayor desgaste de los neumáticos ni de los frenos o las inercias producidas por un mayor peso. lo único que hace la electrónica es un efecto placebo y paliar triste pero efectivamente las leyes físicas.
Me niego a unirme al club de los coche modernos. Sé que solo soy un «viejo rockero» pero, afortunadamente, aunque solo tengo 26 años (soy de la generación del 85) tengo a dia de hoy el placer de haber disfrutado de algunos ejemplares curiosos, como un Nissan Skyline r32 gtr como el que pilotó Luis Pérez Sala en los 90 contra bmw´s m3 e30 y algunos sierra cosworth, cuando yo era solamente un niño, y que guardo en mi recuerdo tan cariñosamente. Buenos tiempos, sin duda.
Toyota Corolla (AE86), Japón sabe hacer coches con alma - 8000vueltas.com
2 de marzo de 2012 a las 05:37[…] desapercibidos. Puede que ni sean rápidos, ni bonitos, ni lujosos; pero para vosotros tiene ese “algo” que no podéis poner en palabras que os hace coger cariño y hasta adorar a un modelo concreto de […]
Guest contributor: Juan Muñoz on driving the Porsche 911 (993) Targa (part 2 of 2) « . . .
16 de marzo de 2012 a las 06:01[…] The most fascinating commonality between these two cars, the 993 and F355, is that they were manufactured at a technological point in time when cars were properly designed and engineered, but the heavy-handed nanny state hadn’t yet taken hold as is the case today. […]
delmonte
20 de marzo de 2012 a las 19:29no sé cómo he llegado a esta entrada tan antigua, pero bienvenida sea: he disfrutado horrores leyéndolo y me adhiero totalmente a lo comentado
enhorabuena por haber descrito tan bien las características de esos coches que nos hacen disfrutar, que no conducimos para transportarnos de un lado a otro, sino que acabamos yendo de un lado a otro para conducirlos y sonreir haciéndolo
en fin, qué os voy a contar yo, desde mi 911 sin controles… ;)
felicidades!
Ivan
29 de noviembre de 2012 a las 14:33Hola.. creo que tome algún túnel del tiempo y caí en esta nota :) que, debo decir también me atrapó.
Desde un punto de vista sentimental, o romántico si se quiere.. me quedo con los autos «de la generación anterior».. Porque? Simplemente son mas divertidos de conducir, hay un dialogo entre auto y conductor (que hay que saber entender), y mientras menos relojes tenga.. mejor, mas afinas el oído, la vista y el olfato :). Al subirte te dedicas a eso.. a manejar y a disfrutar.. aunque claro pueda esto requerir mayor esfuerzo que un auto actual.
Son generaciones de autos. Yo tengo 32 años y me identifico con los autos de los 80/90, y quizás también con alguno de los de los 70 y justamente por eso, por tener que manejarlos «mas» y a esa «alma» que muchos le asignamos.
Los autos actuales, son maravillas tecnológicas, llenos de automatismos y sensores alertas a los errores que podamos cometer (y corregirlos), muy eficientes y seguros..
Un tema que da para mas, pero ya me extendí bastante..
Saludos!!
Ivan.
Gatanes
10 de octubre de 2013 a las 05:58Me gustaría aportar mi opinión sobre este fabuloso articulo , como propietario de un GTI MK6(manual como debe ser y si no falta un pedal en el coche) solo puedo decir una cosa , tienes mas razón que un santo , es un coche fuera de serie no cabe duda , pero sinceramente no transmite las sensaciones de antaño , por peso , electrónica etc… es paradójico que diga esto teniendo en cuenta que soy un novel con mis 19 años recién cumplidos , pero es que cuando veo un GTI mk1 o mk2 (por decir algo) siempre me pregunto que ha pasado , que piensan los ingenieros de VW , todo a cambiado mucho antes los deportivos eran super pequeños ej: 308 y ahora son super grandes mira el 458 , los coches de ahora son grandes , pesados y están cargadisimos de electrónica , pero , es lo que la mayoria de la gente lo demanda y es lo que hay , una verdadera lastima , siempre nos quedaran los 80 , los f355 gts y Walter Rohrl.
Enhorabuena por el articulo.
Dioniblack
25 de abril de 2015 a las 14:27Estoy totalmente de acuerdo con el artículo. Desde el año 2010 en el que está escrito este texto la cosa no ha hecho más que empeorar. Solamente hay, para mi forma de verlo, dos modelos actuales que siguen los cánones marcados por el deportivo clásico, el Toyota GT86 y el Alfa Romeo 4C.
Yo siempre ha sido un entusiasta de los coches. Mi primer coche fue un 1.6 atmosférico de 90cv heredado de mis padres. Tenía un bajo peso y aprendí a conducir con el, a realizar mis primeras rutas y a entusiasmarme con el sonido al estirar el motor a gasolina. Mi padre conducía la típica berlina tdi infinitamente más rápida, pero que no transmitía ninguna emoción. Recuerdo la primera vez que apuré la frenada con su Laguna..se encendieron los cuatro intermitentes a modo de emergencia!!!
Actualmente, por causas del trabajo tengo que conducir bastantes kilómetros al día. Por una carretera a la que no le falta un pequeño tramo de montaña. Necesitaba un coche que no consumiese demasiado y que, por supuesto, no fuese diésel. La verdad es que no es fácil encontrar un coche que trasmita sensaciones con estas dos premisas. Al final compré un Honda CR-Z el cual me divierte mucho en las carreteras más reviradas. Estoy encantado con el chasis que tiene. No obstante, sigo esperando el momento para comprar un S2000….
carkeysystem.com
8 de septiembre de 2015 a las 13:57Fantastico articulo.
cerrajeros atocha
19 de agosto de 2016 a las 09:25Muy interesante, enhorabuena por el blog!
Eduardo
30 de noviembre de 2016 a las 06:09Si quieren potencia y velocidad consiganse una avioneta al menos …si llegan a tener la oportunidad de manejar un avion de combate aunque sea viejito veran lo que es Vivir Los carros son un juguete de niños adultos..Me da risa un amigo presumiendome su nuevo porsche gt3 r que es muy rapido 300 km por hora es NADA .Lastima que el humano promedio nunca tendra la posibilidad de ir a mas de 500 …Cada año salen y salen nuevas versiones gt gtrsrt rt r8 r z tantas versiones de lo mismo…
Tom
4 de junio de 2017 a las 23:47Estupendo artículo, muy bueno de verdad.
Manuel López Casado
5 de junio de 2017 a las 20:39Mi icono: Peugeot 205 Rallye. La fórmula es muy fácil, aunque irreproducible en estos tiempos: bastidor, suspensión, peso ligero, motor y frenos. ¿Para qué más?
delarosa
8 de junio de 2017 a las 15:43¡Qué articulazo!. Está mal que lo diga yo, que lo he escrito, pero me ha encantado reencontrame con este texto. He disfrutado leyéndome. Supongo que eran tiempos mejores… :)
Leonardo Mendez
8 de marzo de 2018 a las 08:14No es blasfemia pensar asi, mi Falcón 72 deluxe preparado es mi amor eterno, es ese auto que genera mil sensaciones ya con solo verlo pasar o escucharlo sonar con ese ruido bien trabado que tiene, también esta armado con algunas piezas de fabricación propia que le dan un tono raro pero elegante, fueron varias las expo en las que me dijeron «tu Falcón es raro nunca Vi uno asi», pero al margen de eso, hablar del alma de un auto no es blasfemia de hecho es muy lógico, hay autos que tienen toda una historia atras, cuantos lugares habrán pisado? Cuantos dueños habrá tenido?, y sobre todo cuanto amor habrá recibido? Horas y horas de trabajo y cariño….. Eso es lo que para mi también le proporciona al auto lo que nosotros llamamos «alma», lo conocemos tan bien que sabemos cuando quiere que cosa, cuando le falta que cosa y realmente el auto nos avisa antes de caer y hasta las ultimas expensas nos lleva a destino, todo aquel que ame los autos tiene esa duda general….. Este bicho esta vivo o que carajo pasa acá?.
Llaves de coche
12 de agosto de 2019 a las 19:42Totalmente de acuerdo con lo que comentáis en el artículo. Los coches ya no transmiten ni despiertan esas paciones que generaban los coches hace unos años. Todos son buenos (en líneas generales) todos son durables, pero ya no despiertan esos sentimientos ni tiene la personalidad que podíamos sentir que tenían los coches de hace unas pocas décadas.
Muy buen post. Saludos.
EGINER
29 de septiembre de 2021 a las 11:39Sensacional artículo, los deportivos han ganado muchas prestaciones con la evolución de la automoción pero lamentablemente han perdido algo de alma y con las restricciones van a peor, una lástima. Saludos
Todos los coches van al cielo… – 8000vueltas.com
4 de marzo de 2022 a las 11:03[…] mayor, muchas cosas me lo indican. Hace años ya escribí un artículo titulado «El fin de los coches» y no me gustaría volver a escribir el mismo artículo. Aunque lo recuerdo vagamente […]